Escalera de crímenes de Ager Aguirre Zubillaga
Además, Dios no existe. Y, si existe, no es más que otro vulgar embustero. Un Dios bueno, un Dios protector, no permitiría que una niña inocente se suicide por culpa de unos desgraciados. Un Dios omnipresente no admitiría cerdos mezclados con sus ovejas, los expulsaría de su rebaño y los condenaría, y mucho menos permitiría que los cerdos fueran mayoría. Y que nadie me venga con lo del libre albedrío y la voluntad que Dios nos ha dado para ser emancipados de pensamiento. ¿Qué estupidez es esa?
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