La casa del dolor ajeno de Julián Herbert
Reprimir, y aún exterminar a un grupo determinado de la población, tomando como pretexto el bien publico, no es otra cosa que una ilusión esquizoide, la legalizacion subrepticia del caos
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La casa del dolor ajeno de Julián Herbert
Reprimir, y aún exterminar a un grupo determinado de la población, tomando como pretexto el bien publico, no es otra cosa que una ilusión esquizoide, la legalizacion subrepticia del caos
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