El tercer lado de los ojos de Giorgio Faletti
Por capricho de Dios, los seres humanos ya no podían abrir las aguas y ahora estaban obligados a construir puentes.
|
El tercer lado de los ojos de Giorgio Faletti
Por capricho de Dios, los seres humanos ya no podían abrir las aguas y ahora estaban obligados a construir puentes.
|