El bello verano de Cesare Pavese
"Bajo aquella mirada, las lágrimas afluyeron de nuevo a sus ojos. --- Vamos --- dijo Guido medio en broma ---, se viene al mundo por tan poco tiempo, que no hay necesidad de llorar. --- Lloro porque estoy contenta --- dijo ella despacio. --- Eso es otra cosa, pero otra vez dilo enseguida." (Pág.124). |