En esta obra nos encontramos relatos de muy diversa índole: unos son más de inclinaciones místicas, otros son apuntes de paisajes, tipos y costumbres donde pasó parte de su juventud, otros son sucedidos en Marineda y que le contaron a ella, etc. Todos ellos están narrados con una pluma excelente como siempre y reproduciendo en muchas ocasiones el lenguaje propio del hablante para que sea lo más real y cercano a la realidad posible. Los que más me han gustado han sido "La dama joven" en el cual se relata la vida de una joven costurera que triunfa en el teatro pudiendo ser la próxima "dama joven" del teatro español. Por otra parte, el cuento de "El Príncipe Amado" que es, según ella, "el único cuento para niños que he escrito en mi vida" y que se asemeja un poco a los cuentos de los hermanos Grimm y Andersen pero sin el lado terrorífico. Por último, destaco "La gallega", el cual sería como un pequeño homenaje a esa mujer luchadora y trabajadora que saca para adelante todo, su familia y su casa. + Leer más |
Presentación del libro Lo que quede (Continta MeTienes, 2024). Con Irantzu Varela, autora, e Irene Montero
Queda lo escrito, todo lo demás no queda, escribió Emilia Pardo Bazán, e Irantzu Varela, comunicadora vasca, feminista, bollera y activista gorda, retoma estas palabras y las trasforma en una invitación a adentrarnos en estas memorias autopornográficas en las que nos cuenta cómo ha llegado a ser quien es hoy.
La escritora y monologuista compone esta biografía a través de relatos cerrados que, potentes como disparos, en ocasiones nos queman la piel, nos llenan de rabia y nos dan ganas de quemar cosas. Sin embargo, en sus palabras siempre hay una puerta abierta, el apoyo de las suyas, la ternura con la que habla de sus raíces y por supuesto la intención deliberada de convertir los dolores y violencias propias en movimientos y acciones colectivas.
Varela no se presenta sola, sino que a lo largo del libro convoca un akelarre de mujeres artistas, a través de cuyas citas y referencias podemos aproximarnos al universo más personal y político de la autora. A falta de reparación, o a la espera de ella, ojalá Lo que quede sirva como alivio de lo vivido.