Segundo libro de la trilogía de Knockemout. Tenemos a Nash, el jefe de policía, que en el anterior libro sufre un tiroteo y aunque parezca que su siempre eterna sonrisa sigue ahí, por dentro se está desmoronando, y la única que se da cuenta es Angelina. Angelina es una mujer que ha ocultado a sus seres más queridos su verdadera vida, para no preocuparlos. Trabaja como "cazarrecompensas" y siempre está corriendo riesgos. Uno de sus trabajos la ha acercado a Knockemout, donde vive su viejo amigo Knox, y parece que se va a tener que quedar una temporada, en el piso de al lado de nuestro jefe de policía. Y es que entre los dos existe la atracción, pero Angelina nunca ha tenido una relación, y lo que ve en los ojos de Nash no le gusta nada. Nash sabe que no puede apoyarse en una persona para recuperarse, pero su nueva vecina está siempre en su cabeza. Siento que quizás ha sido un poco repetitiva la trama con el anterior, solo un poco. Me gusta que sigan apareciendo los personajes de los otros libros y ya solo me queda uno para acabar con esta historia. + Leer más |