Este es un libro que quise leer porque es de la gran Mary Balogh. A día de hoy me cuesta cada vez más encontrar novelas románticas que me sorprendan o me atrapen, pero Balogh tiene un par de títulos que son unas grandes joyas y en general, aunque otras de sus historias no sean tan maravillosas, suelen ser historias bien construidas, con personajes diferentes y una buena ambientación. Vamos, que con Mary Balogh no nos equivocamos nunca. No conocía este título y forma parte de, por lo menos, una bilogía, como ella declara en el prólogo de la historia y puesto que conocemos a los personajes secundarios que serán protagonistas en ella, ya os adelanto que nos quedan muchas ganas de leer esa continuación. Pero vamos con este libro, que fue escrito hace bastante. No es la mejor novela de la autora, pero aun así yo la he disfrutado y creo que engancha. Si os gusta la novela histórica, os animo a leerla cuando podáis. Eso sí, no deja de tener sus más y sus menos. Uno de los aspectos diferentes es que en esta historia la autora se esfuerza mucho por describir la ropa de los personajes, en especial la de Lucas. Es un hombre que crea modas, que utiliza abanico, que se fija mucho en la ropa y tiene fama por eso. Es un aspecto diferente que darle a un protagonista masculino y me ha gustado. La historia tiene un punto predecible, aunque dentro de eso también hay algo diferente. No voy a decir que no me lo esperaba, pero puede llegar a sorprender a alguien. Y es que la historia de Anna y la de Lucas parte un poco de historias que ya podemos conocer. Él está herido, creció en una familia un poco fría, en especial por su madre, y cuando era muy joven se enfadó muchísimo con su hermano y se fue, por lo que estuvo mucho tiempo apartado. En ese tiempo su personalidad cambió y cuando conoce a Anna se casa por motivos logísticos más que nada. Por supuesto, crecerá ahí una historia de amor en la que él no quiere amar a su esposa pero ¿qué ocurrirá al final? Pues seguro que lo sabéis, pero eso no le quita interés a la historia. Por su parte, Anna tiene también una historia detrás y ahí aparece el antagonista. No cuento más. Mary Balogh muchas veces escribe historias geniales y lo que motiva todo es únicamente la relación entre los protagonistas, en este caso incluye este elemento que lo dificulta todo, que es este antagonista. Yo, personalmente, disfruto más las historias cuando la relación es lo principal (si está bien llevada claro) y estas subtramas no las disfruto tanto, pero bueno, no está mal. La historia de amor no es de las mejores, sinceramente. Para mi agrado, se centra demasiado en el plano sexual y esto tampoco es tan común en la autora, pero puede que sea por que es de sus primeros escritos o por cualquier otra razón, pero hay bastantes escenas de cama. Sin embargo, no he sentido emoción con el romance, como que no he terminado de creérmelo o los personajes no me pegaban como pareja. Otra cosa que no llevé bien fue el comportamiento de Anna. Por una parte, los fragmentos que más se centraban en ella nos permitían conocerla mejor, pero esa personalidad que se presentaba no me casaba con como se comportaba después flirteando con Lucas. No quiere casarse, no puede y bla, bla, bla, pero luego le dice que sí, todo avanza y llega la boda. Es tímida, no quiere conocer a nadie, pero flirtea con él… No sé qué opinarán las personas que hayan leído el libro, pero a mí me confundió un poco. Y por último, quería mencionar al personaje de Emma. Emma es la hermana menor de Anna y en este libro es solo una niña, pero tiene un rasgo muy peculiar: es sordomuda. En un mundo en el que no había lenguaje de signos, Emma lo tiene muy difícil para comunicarse de los demás y menos mal que ha aprendido a leer los labios. Sin embargo, encontrará en la familia de Lucas un hogar con personas amables, en especial el hermano pequeño del duque. Hay diferencia de edad, así que en este libro presenciamos un amor platónico, pero puesto que el siguiente libro se titulará Melodía silenciosa, yo diría que Emma será la protagonista. Los momentos que protagoniza ella son tiernos y muy interesantes, preveo que su historia será más interesante que Sin corazón porque la protagonista tiene un punto muy diferente. Me gusta las autoras que se atreven con estos retos, que incluyen personajes ciegos, o mudos, o sordos, o con alguna discapacidad física… (y Balogh ya lo hizo estupendamente en Simplemente enamorados, su mejor novela en mi opinión) porque se visibiliza la variedad existente en cualquier sociedad. Es muy difícil, pero diferente e interesante y yo creo que nos espera una gran historia si la editorial apuesta por traerla. Entonces, en mi opinión, no estamos ante la mejor novela de la autora ni de lejos, pero así y todo tiene buenos ingredientes, engancha, entretiene y está bien escrita. Aunque no sea perfecta, me lo he pasado muy bien leyéndola y me encanta volver a reencontrarme con la prosa de esta autora, de verdad que es de lo mejorcito que nos vamos a encontrar en romántica histórica. Así que, dicho esto, solo me queda recomendárosla si os gusta el género. Una delicia en estos tiempos que corren, en la que la romántica histórica no está tan presente en las novedades editoriales. + Leer más |