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Viendo en el horizonte el estreno de la tercera temporada de los Bridgerton no me pude resistir a continuar leyendo los libros de esta saga. Este no se corresponde con la temporada que van a estrenar (ese ya me lo leí y, afortunadamente, la serie es mucho mejor que el libro), pero quería volver a entrar en el mundo Bridgerton.



Reconozco que iba con cierto miedo después de que la autora se cargara el carácter de Penélope en el libro anterior; pero esta vez he salido bastante satisfecha de la lectura. La protagonista era de nuevo una mujer que, al menos en la serie y en los libros anteriores, es independiente, fuerte y decidida; y, afortunadamente, en este libro ha seguido siéndolo. La novela sigue teniendo una trama principalmente romántica, pero, al menos, la mujer protagonista no es una chica en busca de un hombre que la proteja. ¡O al menos no durante todo el libro!



Después de un tiempo carteándose, Eloíse se presenta en casa de Phillip, un viudo con hijos, para aceptar su propuesta de matrimonio. Ambos tendrán que hacer frente al bagaje que cada uno de ellos aportará a esa relación: Eloíse el miedo a ser una eterna solterona y a no encontrar el amor verdadero y Phillip toda su historia con su anterior mujer.



La verdad es que disfruto mucho leyendo estos libros, me encanta la época en la que se ambientan y, sobre todo, el ambiente romántico que los rodea. Me ayudan a despejar mi mente en los momentos de mayor estrés laboral o personal. Me alegra mucho haber vuelto a conectar con la saga Bridgerton y con su autora, Julia Quinn. ¡Sin duda seguiré leyéndolos!



¿Y a vosotros? ¿Os gusta Julia Quinn?
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Sin lugar a dudas, este libro no me ha dejado indiferente.

Cómo Anthony entra en la vida de Kate y viceversa, creando un auténtico vendaval de emociones y sentimientos que ninguno de los dos quiere aceptar de ninguna de las maneras... Kate por su hermana y Anthony por él mismo.



Y es que no querer enamorarse es un poquitín difícil cuando tienes delante continuamente a esa persona, que es y demuestra ser todo lo que te da la vida al mismo tiempo que te la quita.



Esta historia está llena de momentos divertidos, sobre todo durante las interacciones de nuestros protagonistas. El "odio" o tirria como decimos en mi pueblo, un poco inútil que se tienen, me ha sacado muchas sonrisas. Los momentos difíciles por los que pasa cada uno a lo largo del libro, me han hecho entender mejor por qué son como son y sus comportamientos para con cada uno. He sentido mucha ternura y empatía, sin olvidar la tensión sexual que hay entre ellos en cada página, que es casi lo que más enganchada me ha tenido, sinceramente. Es que quería y necesitaba que pasara algo entre ellos ya por diosssss!! Qué sinvivir! Jajajajaja.



Y tengo que decir, que aunque esta historia es un poco distinta a la que hayamos podido ver en la adaptación que hizo Netflix en su día... me encantan las dos versiones por igual.

Ahora solo queda empezar el siguiente y seguir con estos hermanos tan divertidos y sobre todo tan diferentes para ser la época en la que vivían tan cuadriculada.

“No quiero ver ninguna otra finca. Quiero vivir aquí, y en cualquier caso yo soy tu cliente. Hacemos lo que quiero yo, ¿no?, no lo que dices tú” Entre limones de Chris Stewart.



Hace años que leí todos los libros de Chris Steward porque me resulta muy gracioso como cuentas las cosas, hasta las más cotidianas. El otro día tropecé con este libro en la biblioteca y me entraron unas ganas repentinas de releerlo y nuevamente me lo he pasado pipa.



Es autobiografía. En este caso nos cuenta cómo Chris dejó su hogar en el Reino Unido para instalarse en la Alpujarra en una finca conocida como El Valero –si lo buscáis en internet encontraréis fotos–. Allá se trasladó con Ana, su pareja y comenzaron de cero a rehabilitar la casa, a criar ganado y a cultivar el campo. Cada capítulo se centra en una anécdota, desde que vio la casa por primera, y a través de la historia va reflejando su visión de la zona, de los vecinos, las costumbres, y los desafíos que han de enfrentar. No falta un toque de crítica a los sistemas de cultivo intensivos o al impacto del hombre en la naturaleza y al cambio climático. Todo con la ironía y el humor inglés que le caracteriza.



Este libro se complementa con “El loro en el limonero”, “Los almendros en flor” y “Los últimos tiempos del club del autobús” que no sé aún si releeré pero ahí os los dejo por si os interesan. También es autor de “Tres maneras de volcar un barco”, uno de los libros con los que más me he reído. Ya podría escribir alguno más, pero debe de estar demasiado ocupado con sus ovejas.