Esta novela parece el manual de las relaciones tóxicas en su expresión más cool, si pudiera ser una relación tóxica cool, que no creo. El planteamiento de la autora es tan original que una no sabe muy bien si el dependiente de la relación es realmente quien controla, o es la protagonista la que goza haciendo sufrir a su atosigante marido. He de decir que el personaje principal masculino me sacaba de mis casillas, y que más de una vez me alegré de que se llevara su merecido aunque no fueran las formas correctas. Y la protagonista femenina me indignaba por igual, por no dar el paso evidente que tenía que dar, le pudo la comodidad. Por lo que os digo os haréis una ligera idea de la complejidad de los personajes y de la trama, que una no sabe por donde le van a salir las ideas a esta ociosa pareja. Ideas que afectan a terceros que acaban, sin querer, absorbidos por el tornado que esta relación implica. Sin lugar a dudas la ambientación, entre cocteles, reuniones sociales y buena vida, le dan a esta obra un aire cosmopolita y frívolo, pero que cuando te vas adentrando en las páginas te convences de la complejidad del tema propuesto por la autora. Una vez más los pequeños placeres no defraudan trayéndonos una novela única. + Leer más |