La daga de la ceguera de Brent Weeks
No podía rebatir sus palabras. No serviría de nada. No lo había dicho como si se tratara de una sospecha, ni de una trampa, y si le pedía que lo repitiera, Karris podría oírlo. El corazón de Gavin martilleaba su pecho. Tragó saliva con dificultad, bebió un poco de vino, tragó saliva de nuevo. —La peor decisión que he tomado en mi vida fue la de no contárselo a ella. —Gavin se sentía embotado, conmocionado. No quería pronunciar el nombre de Karris. Mediaba la distancia suficiente entre ellos como para que sus voces fueran apenas un murmullo para la guardia negra, pero esta aguzaría el oído si escuchaba su nombre. |