Bobel y sus padres viven en un triciclo de reparto. La verdad es que están bastante apretados viviendo de esta forma, pero, por otro lado, siempre tienen una vista distinta tras las ventanas al estar continuamente en movimiento. Así son felices, sin embargo, un día, Bobel decide que no quiere conformarse y decide hacerse rica. Y, ese día, todo cambia para la familia.