Estoy aquí para quedarme

¡Hola a todos!

He recibido este libro a través del programa Masa crítica infantil y juvenil que realizó Babelio el pasado mes de enero.

A raíz de una mala experiencia en donde por su peso no la dejaron embarcar en un vuelo, la autora Kelly DeVos decidió escribir esta historia sobre una adolescente con obesidad que desea dedicarse al mundo de la moda, así y mediante dos línea temporales narrativas nos muestra los problemas y el diferente rasero que la sociedad emplea para las personas delgadas vs. personas con sobrepeso u obesas, todo ello a través de los ojos de Cookie Vonn, una adolescente que sueña con ser diseñadora.

Cookie tiene que volar a Nueva York, en representación del blog para el que colabora y acudir a una presentación de moda en la que podrá conocer a Fred LaChapell y a Gareth Miller, dos grandes de la moda a los que desea impresionar con sus diseños y posiblemente conseguir que la ayuden con la beca que tanto necesita para su futuro ingreso en la universidad de Parsons.

Los problemas y humillaciones que sufre durante ese viaje marcan un punto de inflexión en la vida de nuestra protagonista. Cookie se da cuenta de que su sueño se le va a escapar de las manos como no haga algo pronto, pues una chica obesa jamás será tomada en serio en el mundo de la moda, así que después de ese caótico viaje se unirá a NutriNation para comenzar su proceso de pérdida de peso y su cambio de vida.

Cookie es hija de una supermodelo, pero a diferencia de su madre su cuerpo es muy distinto. Su madre siempre ha estado más centrada en su carrera y su vida amorosa que en su propia hija. Su padre es un predicador que recorre el mundo dedicado a las misiones con el que apenas tiene contacto. Por lo que Cookie vive sola con su abuela, una modista que le ha contagiado su pasión por la costura, las telas y la moda.

Tiene diecisiete años y pesa ciento cincuenta kilos, quiere estudiar diseño y moda en Parsons, su sueño es ser una gran diseñadora y vestir y hacer sentir especiales a las personas que usan una talla grande como ella.

En el campamento para gordos al que la envió su madre será donde conocerá a los que se convertirán en sus dos mejores amigos Piper y Tommy del que está secretamente enamorada.

Pero el peso no es el único problema de Cookie pues la indiferencia de sus padres le duele más de lo que quiere admitir. También hay que sumarle la aparición de en su vida de Kennes Butterfield, una chica que parece que desea quedarse con todo por lo que tanto a trabajado y soñado Cookie y que además aprovecha la mínima oportunidad para tratar de hacerla sentir mal.

Casi desde el comienzo he visto en Cookie a una chica que sabe lo que quiere y lucha con todas sus fuerzas por conseguirlo. A pesar de lo que pudiera parecer en un comienzo no veo grandes problemas de autoestima, aunque sí tiene inseguridades pero como cualquier persona, ni como dice la autora al comienzo del libro tampoco se trata de una historia sobre una cenicienta que pierde peso, aunque acompañamos a Cookie durante el proceso no se le da excesiva importancia al adelgazamiento por sí mismo, no se nos cuenta qué come, ni qué hace (solo se nos comenta a grandes rasgos y de manera general), si no que se centra más en la evolución personal de Cookie y las cosas que le ocurren al personaje en su día a día. Durante ese proceso Cookie irá creciendo y madurando, tendrá al alcance de su mano lo que siempre soñó y cuando lo tenga tendrá que decidir si ese es realmente el camino que quiere para su vida o no, porque el estar gorda o delgada no cambia la persona que en realidad eres ni tus miedos e inseguridades.

A pesar de la pérdida de peso de Cookie ella sigue siendo la misma y teniendo el mismo sueño, crear ropa bonita para todos, especialmente para las personas que usan una talla grande, su pérdida de peso la hace más consciente de lo diferente que es la forma en la que era tratada antes y cómo la tratan ahora.

La historia nos muestra alguno de los problemas y humillaciones a los que se ven sometidas las personas con problemas de peso. En general es muy fácil pensar que una persona está gorda porque quiere, porque come en exceso sin cuidar su alimentación, pero no siempre es así y eso lo vamos a ver en este libro. Hay gente que por mucho que se esfuerce su cuerpo no le permite perder más peso, gente que tiene problemas emocionales que le llevan a intentar compensar esas carencias con la comida, gente que no sabe comer adecuadamente, vamos una multitud de motivos por los que una persona puede tener sobrepeso. Por más que pasen los años sigue asombrándome que el mundo de la moda pueda considerar las tallas 40, 42 o 44 como tallas grandes cuando suelen ser las tallas más habituales de la mayoría de la población, para mí una talla grande es a partir del 46 o 48, debo de ser muy rara yo.

El libro tiene trescientas dieciséis páginas divididas en dos líneas temporales: gorda y delgada, pasado y presente, antes y después de perder peso, cada capítulo intercala un hecho o anécdota del pasado de Cookie que la mayoría de las veces tiene alguna relación con lo que se nos narrará en el capítulo del presente. Está forma de narración me ha atrapado pues la autora te deja con ganas de saber más del pasado de Cookie cuando lees uno de esos capítulos y de saber qué le depara el futuro cuando lees los capítulos del presente.

La trama es ligera y amena, es un libro cortito que se lee rapidísimo, apenas me ha durado dos días. Y es que la historia de Cookie refleja mucho el sentimiento de las personas que tenemos sobrepeso en el que la báscula se convierte en todo lo que eres.

Una historia sobre luchar por tus sueños y hacer lo necesario para conseguirlos sin dejar de lado a la persona que eres.


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Estoy aquí para quedarme ha sido un libro que he leído en dos días. Es un libro entretenido y cortito que se lee muy bien. La historia es buena, pero no me ha sorprendido.

Cookie tiene problemas de peso, desea con todas sus fuerzas ser diseñadora de moda y tiene talento para ello, pero su situación familiar es complicada y además, hay una chica que le hace la vida imposible. Así que decide adelgazar utilizando a una empresa nutricionista.

La historia me daba muchísima curiosidad, así que empecé a leerlo en cuanto me llegó. Es una buena historia de superación y aprendizaje, pero me ha faltado originalidad. al principio me confundía mucho los saltos en el tiempo que tiene, ya que son dos líneas temporales, pero luego me acostumbré.

Como digo, no es una historia muy original pero sin duda se deja leer, es un gran libro para pasar una tarde entretenida y, además, te hace reflexionar sobre los pensamientos de gente con sobrepeso. En ocasiones me daba la impresión de que el tema no estaba bien llevado, porque hay que tener mucho cuidado con este tema, pero luego la protagonista se explicaba y lo entendía mejor.

Si os gusta el tema y queréis reflexionar y ver como la protagonista se supera a sí misma y empieza a madurar, yo lo recomiendo.

Cookie es una joven apasionada de la moda, cuyo empeño es el de llegar a lo más alto para lograr que las mujeres con una talla superior a la 38 también puedan gozar de su lugar de honor en la alta costura. Pero las cosas no serán fáciles para Cookie Vonn, que creerá que sus 153 kg. serán un impedimento en ocasiones para llegar a sus objetivos. Para ello comenzará una dieta que la hará alcanzar la codiciada talla 36, pero todo lo que ella pensaba que sería un camino de rosas tras lograrlo, no resulta tal y como ella auspiciaba.

Me ha encantado la pluma de la autora, sencilla, directa, divertida y descriptiva solo cuando es necesario. La forma de estructurar el libro, también me ha parecido un gran acierto, pues dota de agilidad a la historia y lo hace más divertido y entretenido.

La historia de Cookie es apasionante y llena de aprendizajes no solo para ella, sino para el lector. No por ser delgada obtienes el triunfo y eres portadora de talento. Cookie descubre que haber adelgazado solo le ha dado visibilidad en el lugar equivocado, donde antes era invisible; mientras, el lugar acertado siempre la había visto, desde el principio.

Los personajes están muy bien definidos, lo que ayuda mucho a crear simpatías como la abuela, Tommy o Piper; sentimientos encontrados como Gareth o animadversión como Kennes o Chad Tate.
Una novela necesaria, que reafirma el talento por encima de la apariencia física.
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Aunque algún personaje me ha sacado de mis casillas, la evolución de Cookie es impresionante y me he sentido identificada con ella en ocasiones.

Dado que la autora alterna entre pasado (gorda) y presente (delgada), con capítulos cortos, la lectura se hace muy amena. Además, escribe de forma muy directa.

Si bien he echado de menos un poco más de descripción de los escenarios, la situación de Cookie ha sido muy bien descrita y me ha gustado.

Esta es una de esas historias que te llegan por lo que cuentan, por el mensaje. En mi caso, he disfrutado mucho de acompañar a Cookie en su evolución.

Nuestra protagonista se llama Cookie Vonn y es una chica a la que le encanta el mundo de la moda y su sueño desde pequeña ha sido ser diseñadora. Pero ella no lo tiene muy fácil, porque como todos sabemos en el mundo de la moda no gustan mucho las "tallas grandes" y nuestra protagonista pesa 130 Kg. con lo cual, lo pasa un poco mal intentando ser aceptada en alguna firma grande. Incluso crea un blog como para desahogarse al que llama "rellenitas" (el cual me encantó) para hablar de sus propias experiencias.
Sufre un gran cambio físico debido a su perdida de peso, y los capítulos son contados por la misma protagonista pero en dos momentos muy distintos de su vida, antes y después de adelgazar, lo cual consigue ir trasladándote de un punto a otro fácilmente y sin ninguna pérdida.
Cookie Vonn a pesar de estar "rellenita" es una persona con muchísima fortaleza y yo creo que sin ningún tipo de complejo a pesar de lo que le diga la gente y eso me encanta.
Su amiga Piper también me ha gustado mucho y me habría gustado que se hablase más de ella.
Es un libro en el que al final te hace ver que no por ser delgada y tener un aspecto perfecto, se es mejor persona o te va a ir mejor en la vida (así es como piensa al principio nuestra protagonista).
Al final no importan los kilos ni la talla, lo que importa es el interior de cada persona.
El libro te da una lección de vida, que aun que seguramente todos sepamos, la belleza está en el interior.

Esta lectura me entró por los ojos en cuanto leí la sinopsis. Me atrajo mucho el tema y tenía muchas ganas de leerlo, así que lo empecé en cuanto llegó a mis manos. No es un libro muy largo y se lee rápido porque sus capítulos también son breves.
Mi percepción general de la lectura es que me ha dejado bastante confusa, me cuesta un poco decidir cómo me siento al respecto. Por un lado, efectivamente, el tema es interesante. Vivimos en un mundo en el que la imagen es cada vez más importante y hay mucha presión social por encajar en unos estándares. No obstante, y de forma paradójica, el sobrepeso crece a día a día entre la población, aunque eso no evita que haya muy poca representación en el mundo de la moda.
Esto no es nada nuevo, pero creo que tratar estas preocupaciones sociales puede ayudarnos a tener más empatía, porque mucha gente si no padece este tipo de situaciones de forma directa no lo piensa y participa en ese estilo de conducta que va desde la mofa al menosprecio hacia las personas obesas. En general, puede decirse que a día de hoy la sociedad no va bien encaminada ante el deber de aceptar el físico de cada individuo, y no solo en lo concerniente al peso.
Uno de los aspectos de la ambientación que destaca por no ser tan común es el del ámbito de la moda. El libro es breve pero considero que la autora hace un buen trabajo a la hora de documentarse, al menos no se limita a darnos un par de líneas. Ahora, no estoy tan segura de que la manera de transmitirla haya sido la idónea.
En todo su conjunto la novela cuenta con una estructura que, a mi juicio, no ha terminado de cuajar. Está narrada a través de capítulos alternos, uno de ellos sería la línea presente, que se distingue porque Cookie ya está delgada, mientras que la otra se sitúa en el pasado, mientras estaba centrada en su programa de pérdida de peso. Ese aspecto sí que no ha estado tan presente como el de la moda, realmente no sé en qué consiste su dieta o su rutina diaria de pérdida de peso.
Creo que puedo decir que se ha quedado coja, y no únicamente en ese aspecto. El ritmo es bastante rápido, sobre todo hacia el final, como no, y hay saltos muy grandes. Es difícil seguirle el ritmo a las emociones y pensamientos de la protagonista y aún más a los de los personajes secundarios. Su amigo Tommy la ayuda mucho, pero de un momento a otro hace cosas que no se corresponden con la persona que describía Cookie. Lo mismo sucede para la antagonista del libro y para Garreth Miller, otro personaje. Los padres de Cookie son casi fantasmas, así como su abuela, no hay mucho que apreciar.
No consigo entender o ver lógico que ella piense que una persona es desagradable o mala gente por x razón, pero luego mantiene una relación con ella. No digo que las emociones deban ser lógicas, pero el personaje tiene un proceso para llegar de un pensamiento a otro totalmente contrario y el lector debe ser partícipe de ese proceso, porque sino todo es muy artificial y no le hallamos explicación. Es como si Cookie tuviera grandes cambios de opinión y se contradijera a sí misma.
En consecuencia, la lectura ha sido entretenida y rápida, pero quizá ha sido más ligera y menos satisfactoria de lo que me esperaba. El cambio de las líneas temporales hacía que perdiera el hilo de lo que pasaba en un momento u otro y en especial en la relación con otros personajes se me ha quedado corto. Sin embargo, no me llevo una mala impresión, pero sí la sensación de que podría haber sido mejor.