Última estación

Es una historia real novelada, en la que su autora, Yolanda de la Puente rinde un sentido homenaje a todas las víctimas de aquel trágico accidente ferroviario, que tuvo lugar aquel fatídico 3 de enero de 1944, en el túnel n.º 20 en Torre del Bierzo. Una realidad, que fue ocultada por el régimen franquista, y que su autora nos da la oportunidad de conocer, narrándonos la verdadera magnitud de la tragedia; a través de una historia conmovedora que aúna realidad y ficción.

Una novela que se estructura en tres partes bien diferenciadas, subdivididas a su vez en unos capítulos, que por lo general son cortos y siguen una línea temporal, que nos ubica en unos escenarios que a su vez nos llevan a profundizar en la compleja historia personal de los protagonistas; sus amores, desgracias, ambiciones y humillaciones. Siendo la ciudad de Madrid, el marco ambiental que determinará el futuro de los protagonistas de esta historia.

Una trama que arranca tomando como escenario, el Expreso de correo 421, justo unas pocas horas antes del accidente. Y que nos llevará a ser testigos, de aquellas aflicciones del pasado que acompañan a nuestros protagonistas. Así conoceremos a Almudena Olivera, la joven enfermera, que viaja a bordo de aquel tren junto a sus recuerdos más preciados. Aquellos que le llevarán a evocar el último beso con su amado, así como a revivir, el tormento y la rabia repentina, por una guerra fratricida que acabó con el sueño de ambos.

Entre los pasajeros que la acompañan, está Mercedes, una madre de familia que aparenta ser una de esas mujeres chapadas a la antigua y de fragilidad fingida, sin embargo pronto descubriremos que se trata de una mujer sin dobleces, forjada a sí misma y capaz de hacerle frente al tortuoso compañero de viaje; el Teniente Buendía, un militar arrogante, de mirada penetrante e insondable, que se encuentra cumpliendo una misión especial bajo el mando del Coronel Britz, un ser solitario que es admirado y respetado por todos, salvo por el envidioso Alfredo Buendía. A los que se sumará el enamoradizo fotoperiodista, Ignacio Quirós, quién devolverá a Almudena a aquel pasado imposible de olvidar.

Desplazándonos al escenario, de Torre de Bierzo, donde tuvo lugar el accidente ferroviario más grande de la historia de España. Reviviremos el dolor que acompañó a los miembros de aquellas familias vinculadas al linaje ferroviario. Así conoceremos a María Encina, la hija menor de los Aguilar, una chica fantasiosa que es tomada por todos, salvo por su hermano Miguel, por una joven chiflada. Sin embargo, María es una chica poseedora de una fortaleza que le hace capaz de adaptarse y superar cualquier contratiempo. Así la veremos crecer en todos los aspectos, convirtiéndose en una mujer dispuesta a ser la dueña de su destino, mientras el resto de personajes quedarán atrapados en un pasado, marcados por aquella tragedia que les provocará una tremenda sed de venganza.

Estamos ante una trama, en la que las emociones se canalizan y convergen en una España de la postguerra, en una España de la escasez, de la miseria y el miedo. Siendo de la mano de los protagonistas que nos acompañan, como reviviremos aquel periodo sin precedentes que convirtió a los españoles en una sociedad empobrecida y temerosa, víctimas del exilio, de las depuraciones y las represalias. Convirtiendo aquel fatídico día del accidente, en un punto de inflexión en la vida de nuestros protagonistas, que se niegan a aceptar el falso informe emitido por la autoridad judicial, con el que pretenden ocultar las cifra real de fallecidos, así como el mal estado en el que se encontraba el tendido ferroviario tras los efectos devastadores provocados por la Guerra Civil. Y es que aquella era una imagen devastadora, que el gobierno franquista no se podía permitir y que pondrá en entredicho la veracidad del sistema judicial.

Es una historia en la que toma especial relevancia, la compleja historia personal de los protagonistas. Junto a ellos descubriremos las diferentes clases de amor, lo fugaz que puede llegar a ser la felicidad, lo breve y efímero que es el tiempo, lo utópica que puede ser la libertad. Y es que estamos ante un elenco de personajes que se muestran especialmente humanos, que pese a esforzarse por sobreponerse a las adversidades de la vida, se muestran sin ilusión ni alicientes y perturbados por una rabia contenida que les empuja a la acción. Una rabia que se vuelve sorda y constante en la vida de Ignacio Quirós, siendo este un personaje que no ha llegado a convencerme del todo, al mostrarse excesivamente temerario y arrollador.

En definitiva, es una novela con la que he disfrutado de una lectura fluida y con la que me ha sido inevitable no emocionarme, reviviendo los sentimientos, frustraciones, decepciones e ilusiones de los protagonistas. En una historia ambientada en los grises años de la postguerra, que hace justicia a la verdad que fue vulnerada por un gobierno franquista. Sin duda una lectura que no puedo dejar de recomendar en especial a todos los apasionados de la novela histórica y que estén interesados en conocer qué fue lo que realmente ocurrió aquel fatídico 3 de enero de 1944.