Los ojos del hermano eterno

Virata es el protagonista de este cuento espiritual y filosófico donde Zweig sorprende con la fórmula narrativa de leyenda oriental.

De la trama solo hablaré de un guerrero abnegado que cumpliendo el encargo de su rey sufrirá un doloroso suceso, que le llevará a un continuo estado de culpa, búsqueda, y contemplación.

Con todas las musas a favor, el autor navega con soltura el oleaje de la técnica, el mensaje, la claridad de ideas y la ejecución alcanzando el nirvana.
Si la perfección existiera, se llamaría Los ojos del hermano eterno.

Que nadie se asuste. A pesar del alto contenido reflexivo, Zweig tuvo la mente más despejada que nunca (que ya es decir) haciendo muy asequibles los conceptos que quiere transmitir.
Lo bello y lo fácil.
Con una neurona sobra.

Las consecuencias de tus actos sobre los demás es el hilo principal, incluso cuando evites todo contacto, el alejamiento y la pasividad también infieren directa o indirectamente en
el prójimo. Eternos culpables. Algo de lo que no podemos escapar.

La justicia cobra también notable importancia. ¿Quién está verdaderamente capacitado para juzgar, condenar e imponer castigo a nadie?

Con tu sentencia, modificas la vida del acusado y su entorno, ¿cuál es entonces la justa pena y quién el juez realmente capacitado?
Lo mismo ocurre con la sabiduría.

El relato está salpicado de humildad, la más efímera de las bellezas que el ser humano se empeña en cubrir con capas y capas de maquillaje superficial.

Y con todo, leído de forma tranquila, con el amanecer silencioso de un domingo.
La sensación ha sido de paz.
Y placer.

Siempre Zweig, impecable, inolvidable, irresistible.
Un bellísimo cuento, y como siempre, nos encontramos con la maestría del gran escritor Zweig, aunque en este relato, el autor, abandona los escenarios europeos, al que nos tiene acostumbrados y nos traslada a la civilización oriental y bastantes siglos atrás.

Es un libro muy curioso y muy bello, también muy corto y escrito como una leyenda oriental. Pero eso sí, un libro cuya lectura nos inunda de pensamientos y reflexiones. Grandioso.

Nos narra la historia de Virata, el gran protagonista de la historia. Es, primero, un soldado experimentado a quien el rey le pide su ayuda para sofocar una rebelión, consigue la victoria.

Y en esta lucha murió su hermano, a partir de aquí no dejará de recordarlo en cada una de las emociones, que siempre le van a recordar a los ojos de su hermano eterno. Y de aquí el gran título propuesto.

Sin embargo, después de este desafortunado y terrible incidente, Virata reflexionará y le hará replantearse toda su forma de vivir.

A partir de aquí, nos adentramos en sus atormentados pensamientos que lo llevarán a cambiar su vida, rechaza los favores que el rey le ofrece, y poco a poco, elude toda actividad con el fin de llegar a ser un verdadero hombre justo.

Ya que se repite constantemente “quien mata a un hombre, mata a un hermano”, y comienza su andadura por una vida diferente. Deja de ser guerrero, será el juez del reino, nunca dictará penas de muerte.

Comienza a ser muy respetado pero va dando gigantescos pasos, intentando buscar la justicia.

¿Lo conseguirá? ¿Es posible llegar a ser una persona justa para todos? ¿Existe la justicia plena? Difíciles respuestas.

Y así nos encontramos con las grandes reflexiones sobre la conciencia, la justicia, la verdad, el dolor para conseguir la sabiduría y llegar a la humildad y a la consecución de la felicidad.

Virata llega a ser el hombre más admirado y querido, pero finalmente, percibe que ninguna actitud ante la vida, está exenta de afectar o perjudicar a otros.

Y a través de la historia de Virata nos embarcamos en el aprendizaje de una vida sin acción que también es acción, como indica el propio Virata en las páginas finales del libro.

Y esta es la verdadera metáfora de la existencia, y la intención de mostrarnos la auténtica naturaleza humana en todas su esencia y con todos los papeles que nos ha tocado representar, poder, dudas, amor, necesidades, mentiras, pasiones, madurez… podemos continuar.

Narración impecable y de gran sabiduría. Stefan Zweig consigue hacernos reflexionar y no olvidar. Imposible la indiferencia.

Una verdadera, profunda e interesante lección de vida. Y es que son muchas las enseñanzas que nos transmite su lectura.

Quedan abiertos todos los interrogantes. Imprescindible lectura.

Jolín con Zweig! Lo mismo te escribe una novela sobre el ajedrez (que al final no es tal), o te muestra una vida a partir de una carta, o, en este caso, nos mete de lleno en la época de los reyes, caballeros y espadas.

Voy a reconocer una cosa, me ha puesto muy nerviosa el personaje de Virata. Yo soy el rey y lo mando al carajo al primer berrinche! Madre de dios que hombre maaaas pesado, nada le gusta, oye! Me he llegado a reír porque, siendo como soy, y teniendo un carácter más bien tranquilito, este señor me ha sacado de mis casillas. Que si paz, que si culpa, que si que sí... Anda a la porra hombre! 😒

En resumen, que me lío! Lean a este hombre, tres novelas que llevo, tres tardes estupendas que he pasado, y no aburre, porque cada libro es tan distinto que no te da tiempo a asimilar una historia para que te venga el tipo con otra que no tiene nada que ver! Me encanta !!

Por fin, una novela de Zweig diferente y hasta refrescante, sin su pesimismo hacia la humanidad , sin comentarios misogenos ni hombres pusilánimes.

Una preciosa leyenda hindú, que nos deja un buen sabor de boca y una preciosa historia sobre la humanidad y su manera de juzgar que está bien y que está mal .

A través de un personaje principal fantástico, rico en matices , en trama , en diálogos o en monólogos, nos vamos a una época muy antigua a observar como los estratos sociales, Castas en este caso ,conviven y su manera d escrutarlas, ver su manera de convivir con la naturaleza. Un leyenda con un trasfondo moral fuerte y muy presente , en apenas 80 páginas donde ya por fin, he comprendido porque Zweig me gusta tanto, y sin duda por ser un gran humanista y un gran conocedor de la naturaleza de las personas . Un observador ,sin precedentes, sobre muchos aspectos sociales de los cuáles la misma sociedad ni siquiera es consciente.

Soberbio Zweig en esta leyenda .

"Los ojos del hermano eterno" de Stefan Zweig.

Es una obra diferente del autor, escrita como una leyenda oriental situada mucho antes de los tiempos de Buda.

El tema que trata es la justica; cómo ser justos y cómo llegar hasta ella sin influir en el destino de los demás.

El protagonista, Virata, siendo el mejor guerrero de su reino, tras un acontecimiento traumático para él, decide soltar su espada y mejorar espiritualmente para lograr tener mayor conocimiento y así lograr justo (en su más amplio significado) con los demás. Va aprendiendo a base de errores y de ponerse literalmente en la piel del otro. Con su actitud se convierte en una persona muy respetada y querida, pero una vez fallece, sólo le queda el olvido de todos aquellos que le admiraron en vida.

Es un relato muy corto que se lee en una tarde, apenas 70 páginas, y como digo al principio es muy diferente de lo que he leído del autor hasta ahora. Aún siendo un relato bonito y que da para reflexionar sobre el tema, no sería un título que recomendase especialmente.

Está narrado en forma de leyenda; es el camino hacia la perfección, hacia la verdad de Virarta, un guerrero muy leal a su rey. Una búsqueda de sabiduría y justicia a través de la contemplación y el cambio.

En casi toda la novela se refleja la naturaleza humana a través de la ira, la madurez, el poder, la duda, la culpa…. Una vez más, con su escritura, nos muestra la profundidad y la complejidad de su pensamiento. Su lectura me ha recordado mucho a Siddhartha de Hesse. Recomiendo muchísimo las dos lecturas porque son enriquecedoras y reflexivas.

Una novela intensa pero diferente al resto de su obra.

No tengo claro que he leído.
He sentido este libro como un desastre filosófico, ya que la vida de Vitara se me ha hecho absurda en algunos momentos, nada le viene bien, no quieres responsabilidades, abandona a la mujer y los hijos y aún así se supone que es un místico adorado por sus compatriotas, el Rey le consiente todo...
...y Vitara solo intenta huir de la realidad del mundo.
Desde luego el autor vuelve a conseguir que en pocas páginas se desate una avalancha de emociones, tanto del protagonista como de nosotros los lectores.
Y que el hombre sigue errando y no consigue nada.
No sé, se me ha quedado como mal cuerpo con este librito, lo he sentido muy negativo y supongo que el autor querría lo contrario.

“Los ojos del hermano eterno” (1922) es una novela que cuenta una leyenda hindú y que, por lo tanto, está escrita como tal. Cuenta la historia de Virata, un guerrero muy cercano al rey que un buen día decide retirarse de las batallas. Algo que hizo lo lleva a reflexionar y a querer cambiar de lugar. Esto se trata, a grandes rasgos, de encontrar el camino donde la menor cantidad de personas salgan perjudicadas por nuestras acciones. Y a Virata le va a costar.

Desde el principio sobrevuela ese tono que advierte que va a tratar de algo más grande que unx. No me gusta sacar enseñanzas de la literatura, pero en este caso sentí que era necesario hacerlo, sobre todo por las experiencias que atraviesa Virata. En determinado momento experimenta una de las condenas que emitió (oficia como juez durante un tiempo) y se da cuenta del sufrimiento que generó. Imposible no quedarse pensando.

Metiéndome de lleno con la escritura, me pareció muy bueno, casi impecable. Como es mi primer libro de Zweig no sé si siempre escribe así o si se adaptó perfectamente al modo de narrar una leyenda (me inclino a lo segundo). Ubica en tiempo y espacio, a pesar de que el reino y el personaje son inventos. Por supuesto, eso no importa mucho mientras sean útiles para contar la historia. Cuando leo leyendas suelo sentir que los personajes son de cartón, pero con Virata no me sucedió lo mismo. Tal vez sea porque es una novela y necesitaba un poco más de desarrollo, ni hablar de introspección… Ambas cosas están logradas y aseguran que la lectura sea muy amena.

“Los ojos del hermano eterno” hace una doble invitación. Por un lado, incentiva a seguir buscando leyendas orientales, sobre todo si son ajenxs al tema (como yo). Por el otro, es un buen puntapié para anotarse unos cuantos libros de Zweig para explorar al autor, que vivió en un período difícil de la historia (ambas guerras mundiales) y sufrió las consecuencias. Me quedé pensando si su postura antibelicista no será parte importante de la historia de Virata, ya que los dos cambiaron después de estar en contacto con las implicancias de la violencia.

"Todo lo que sé lo he aprendido de los desdichados, y todo lo que he visto lo he contemplado a través de la mirada de los seres torturados, de los ojos del hermano eterno"¿Qué clase de cuento oriental ascético fue éste? Bueno definitivamente no es lo mejor de Zweig por lo menos para mi gusto no es el medio en el cual explota sus mejores habilidades. Lo prefiero siempre haciendo su análisis psicológico tan particular o expresando las motivaciones de sus personajes y miedos más profundos, incluso en sus biografías se puede percibir bastante este enfoque.La historia en realidad es una parábola (no sabía de qué se trataba hasta que lo leí) que transcurre en oriente donde nos presentan a Virata general ínclito del reino quien luego de una experiencia personal en el campo de la batalla luchará por conseguir la calma y tranquilidad del hombre que no hace daño a nadie y que quiere seguir una vida cercana a su dios. Lo que viene creo es bastante predecible. El relato aburre por momentos pero está muy bien escrito. le pongo esa calificación porque está por debajo de otras obras suyas más inspiradoras.

Una vez más vuelvo a quedar atrapada en La líneas de Zweig en esta ocasión con un hilo más espiritual, más elevado, más filosófico. Sus palabra me cautivan y me inspiran de tal manera que se vuelven credos y verdades. Este libro lleno de sabiduría ancestral me parece simplemente hermoso, con una moraleja que va más allá de la de un cuento o una historia bien contada. A pesar de los tiempos, a pesar de la “evolución” y de la actualidad el ser humano tiene tanto que aprender. El valor y el respeto hacia los demás, honrar la vida y hacer bien. Quienes somos para juzgar? Quien dice qué hay vidas más valiosas que otras? Quien es más grande a los ojos de Dios? Este seguro lo releeré y formará parte de mi lista de los mega super favoritos!