Reveladora precuela que la autora quiso regalarnos a los lectores de sus LC anteriores para darnos a conocer mejor a los protagonistas, los antagonistas, los que se cruzan continuamente en el camino del otro. Los orígenes de una saga que nos ha hecho disfrutar de muchas horas tensas e intensas, sufrir por algunos personajes, odiar a otros y empatizar con la mayoría. Y, aunque se trata del arranque de los problemas, es recomendable leer esta zambullida en el pasado al final de la trilogía, ¿por qué? Porque la vas a saborear mucho más. Cuando parece que no queda nada por revelar, Ariel nos muestra que tiene mucho arsenal en su interior para seguir sorprendiéndonos. Gracias por este regalo. |