Cuánto oro esconden estas colinas

Cuanto oro esconden estas colinas es una novela que no ha dejado de sorprenderme. Y es que pocas veces he sido capaz de adelantarme al siguiente paso de las protagonistas, dos niñas de apenas diez y doce años que han perdido a sus padres, inmigrantes chinos en la época de la fiebre del oro, y huyen de la hostilidad de su pueblo minero cargando con el cadáver en descomposición de su padre.

La novela rezuma hostilidad. Desmitifica la fiebre del oro, poniendo los puntos sobre las íes respecto al papel de los blancos y los esclavos. Aunque son conceptos como la integración, la asimilación, la identidad sexual o el HOGAR a los que una y otra vez vuelve la autora a medida que nos descubre la infancia de Lucy y Sam y nos invita a acompañarlas en su camino hacia un "nuevo" futuro.

En mi cabeza resuena la palabra complejidad, referida, principalmente, a la prosa de C Pam Zhang; elaborada, rica en simbología y cercana a la lírica. Una complejidad accesible, si es que eso existe, porque ni la prosa, ni los elementos de realismo mágico ni las muchas referencias al idioma materno son impedimento para disfrutar de esta historia dividida en cuatro partes de las cuales he disfrutado mucho las tres primeras y menos la parte final, lo que me ha dejado cierto desazón. Y es que no todo suma y tras un final apresurado quedan, creo, cuestiones importantes por resolver o responder.

Es interesante, disfrutable y ofrece algo diferente; solo por eso merece la pena leerla. Sin embargo, creo que sacrifica en ocasiones la historia por la prosa y trata más temas de los que puede abarcar, quedando algunos muy difuminados.