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Primer libro que leo de la autora. La historia nos traslada a Praga, antes, durante y después de la Primavera de Praga. No conocía en profundidad ese acontecimiento histórico y me ha resultado muy interesante y me ha hecho buscar más información al respecto para conocerlo mucho mejor. Nuestra protagonista es Eva, una adolescente a la que vemos crecer y madurar en esa ciudad tan cambiante políticamente hablando. Eve se ve envuelta entre dos amores, por un lado, está Karel, amigo de la infancia y con quien comparte su amor por las artes y la música y por otro lado, tenemos a Milan, un chico que solo aspira a triunfar y tener poder, vive por y para el comunismo que está en auge, trata a Eva de una manera realmente tóxica. Respecto al argumento de la historia, no me ha dado para más, no ha estado mal, pero he sentido que no conectaba con los personajes y eso ha hecho que no logre entrar en la historia como se requería. A pesar de eso, la manera de escribir de la autora me ha encantado, me ha encantado cada descripción de Praga que realiza, cada escena que describe. Cuenta con una narración muy poética y muy bonita, la narración está repleta de metáforas y frases que son poesía pura. Otra cosa que me ha resultado muy original, es que, la historia está plagada de saltos temporales, vamos hacia atrás y hacia delante en la narración constantemente, el lector puede llegar a sentirse perdido en el tiempo, pero cada vez que nos encontrábamos un salto temporal, la autora terminaba un tiempo y comenzaba otro distinto con la misma frase, solo que le daba otro sentido a lo que iba a relatar a continuación. La historia no ha sido lo que me esperaba pero me ha gustado tanto la manera de escribir de la autora que voy a intentar leer algo más suyo, tiene mucho potencial y es una delicia leer algo así de bien escrito. + Leer más |
La producción literaria de Monika Zgustová es amplia y está compuesta por títulos como La mujer silenciosa, Las rosas de Stalin y Un revólver para salir de noche.
Su labor como periodista es constante y como traductora tiene más de cincuenta libros traducidos del checo y del ruso, labor por la que ha sido reconocida con el Premio Ciudad de Barcelona y el Premio Ángel Crespo. Actualmente presenta su novela Nos veíamos mejor en la oscuridad.
