Los niños de humo son treinta y siete relatos breves, algunos muy breves, algunos reales; todos cuentan recuerdos de las cuencas mineras asturianas en diferentes momentos del s. XX, recuerdos de los que vivían allí, gentes llegadas de muchos sitios huyendo del hambre y la miseria. Estos cuentos son un intento de explicar lo que fueron las cuencas, cómo se crearon su propia cultura, mezcla de acentos y costumbres; nos hablan de las reivindicaciones sindicales de los mineros, de los accidentes de la mina, de las costumbres de las familias, de la educación de los niños...esos niños que olían a humo porque el humo siempre estaba presente en sus casas y en sus vidas. Un libro necesario para que no se olvide un modo de vida casi desaparecido. Un libro en el que he reconocido y vuelto a recordar muchas cosas de mi infancia. Un libro que llega al corazón. |