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A los críticos no les gusta porque la tachan de superficial y comercial. A veces los críticos y el "común de los mortales" no tiene porque estar de acuerdo, ¿verdad? Y eso es lo que me pasa a mí, que, hasta ahora, todo lo que he leído de Banana Yoshimoto me encanta. El último ha sido Tsugumi una historia de amor adolescente que no solo habla de amor. La protagonista es la nostalgia más que el amor, o la amistad... Me gusta la sencillez de su escritura, la candidez, la ternura, incluso hasta la simpleza. ¿Simpleza? No creo que una lectura que te llegue al alma y te haga pensar se la pueda calificar de simple... "Es curioso: cuando estás con alguien frente al mar, da lo mismo hablar que no decir nada. No te cansas de mirarlo. Y, por ensordecedor que sea el fragor de las olas al romper, nunca te parece demasiado fuerte" Maria Shirakawa comienza una nueva vida fuera del pueblo donde ha crecido, para marcharse a Tokio a vivir con su padre, y a estudiar en la universidad. Atrás dejará la pensión Yamamoto, situada en un lugar de vacaciones como es la península de Izu, y donde su madre, madre soltera en espera de que el amor de su vida se separe de su primera esposa, trabaja junto a su hermana y cuñado. Atrás dejará su infancia y eso significará dejar a su insoportable prima Tsugumi. Tsugumi es el personaje sobre el que gira el resto, en función de ella, de su enfermedad, de su horrible carácter, quizá condicionado por esa enfermedad que la condena a no vivir una vida normal. La relación de María ("Me llamo María Shirakawa. Como la Virgen". Me resultó curiosa esta afirmación, viniendo de un país con tan sólo el 0,5% de practicantes católicos) con su prima acaba por ser una estrecha relación de amistad, pues ha ido pasando a través del tiempo por numerosas pruebas que la propia María va desmenuzando, lo que le lleva a momentos de nostalgia, dolor, tristeza, pero también de cariño y gozo. "Sabía que aquella noche jamás se repetiría, pero me daba igual. Sólo pensar que, quizás, algún otro verano volvería a vivir una parecida me hacía sentir mejor" Un último verano, la aparición de Kyoichi, del que se enamorará Tsugumi, la desaparición del perro de éste y las graves consecuencias de todo lo que acontece después, marcan la última etapa de sus ingenuos diecinueve años (parece mentira porque siempre da la sensación de que son mucho más jóvenes) Tsugumi o la nostalgia, Tsugumi o la madurez, Tsugumi o el despertar...habría tantas formas de titular esta encantadora obra. Será que echo tanto de menos el mar como las protagonistas, y en cada una de sus páginas casi podía oler a salitre y yodo... "Cuando hacía buen tiempo, el mar relumbraba con una luz especial. Miles de olas rompían resplandecientes sobre la arena y se retiraban, gélidas, dejando una imagen sagrada, casi inaccesible." Enlace: https://militeraturajaponesa.. |
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