Un cielo de sueños dorados

La casa Cardew es como esas mansiones abandonadas que generan un sinfín de rumores entre las personas que radican a su alrededor.

Todos saben que pertenece a dos hermanos que la heredaron luego de la muerte de sus padres, que son apuestos y adinerados, por lo que genera mucha controversia cuando de la nada, deciden volver a su hogar.

Hecho que nuestra pequeña protagonista -Lou- pasa por alto, ya que decide dar sus habituales rondines en aquella casa donde aprovecha para leer la inmensa biblioteca de esta familia y comer algunas de sus manzanas, por lo que en una de esas escapadas, es atrapada por nada menos que el dueño… Robert Cardew.

El joven es todo lo que se puede esperar de una celebridad a la que ha visto solo en revistas; es alto, bien parecido, adinerado y muy sexy... Por lo que no sabe cómo actuar cuando recibe una invitación de parte de él y su hermana para visitar su hogar y asistir a sus glamurosas fiestas a las que ellos están acostumbrados.

La pregunta aquí es, ¿Podrá Lou separar su vida sencilla de este paraíso que solo había sido capaz de visitar en sus escritos?

Como referencia a historias tan grandiosas como lo es el Gran Gatsy, Lou es solo una chica de granja que se siente sola al separarse de su hermana cuando esta decide casarse. Ahora que su “única” mejor amiga se ha alejado de ella, encuentra un refugio en estos dos hermanos que le han ofrecido vivir una experiencia única.

“En mi propia casa nunca había silencio, pero todo ese ruido no impedía que, a veces, me sintiera sola.”

Caitlin Cardew, es una joven preciosa, simpática y bastante extrovertida que ama las fiestas tanto como la ropa. Cuando su hermano mayor le habla sobre la misteriosa huésped que ha estado entrando a escondidas a su casa, se emociona por el hecho de crear a una nueva amiga.

Una relación de amistad que inicia bastante rápido, pues desde el primer momento en que se encuentran, tienen una conexión increíble. Ambas se complementan y se ofrecen apoyo incondicional de vez en cuando, una porque ha dejado atrás la soledad y la otra porque a pesar de sonreír todo el tiempo, esconde un pasado que le atormenta, así que pasar tiempo con Lou le devuelve la tranquilidad  a su escandalosa vida.

Con Robert es un asunto diferente, los separan seis años de edad, sin embargo, es inevitable no notar la camarería que se presenta entre ambos jóvenes. Él la entiende, ve su talento y al mismo tiempo no puede evitar sentir la enorme necesidad de molestarla. Por lo que en repetidas ocasiones veremos a este dúo sonriendo entre una charla y matándose a la siguiente palabra.

“Quiero experimentar cosas más grandes que mi propia vida, no simplemente leer sobre ellas. Quiero escaparme a ese sueño por un tiempo.”

Lo maravilloso de esta novela es la evolución de los personajes, todos son jóvenes entre los diecisiete y los veinticinco años que han tenido que pasar por la presión social de comprometerse, ser orgullo de sus familias y no cometer errores. Lou, también se ve envuelta en ese mundo, ahora que su hermana se ha casado, esperan lo mismo para ella. No obstante, ella busca una vida libre e independiente que le permita hacer lo que más le apasiona… la escritura.

Ahora que su vida está rodeada de bailes, lujosos vestidos y viajes al extranjero, todo pareciera indicar que sus prioridades puedan verse modificados, pero no es así. A decir verdad, el personaje más centrado y que más madura a lo largo de la historia es precisamente Louise, sus pensamientos y sobre todo sus decisiones están en otro nivel, ¡Me encanta su forma de pensar!

Pero sobre todo amo cuanto puede influir en la vida de estos dos jóvenes que se hallan perdidos entre sus secretos más oscuros.

Un cielo de sueños dorados, es una historia que no solo es superficial por la extravagancia de una vida llena de lujos, si no que trata sobre aceptarse a uno mismo, descubrir que es lo que deseas ser mientras te atreves a probar cosas nuevas y al mismo tiempo identificar qué es lo correcto sin dejar llevarse por lo que dicta la sociedad.

Es una novela ambientada a finales de los años veinte, con un toque juvenil narrado a pensamientos de la protagonista, capaz de transportarte a ese mundo tan fantástico que ha decidido experimentar y que al mismo tiempo la autora tiene la habilidad de hacer sentir participe de todos los eventos tan extravagantes a los que asiste Lou por primera vez, casi como si nosotros fuéramos los invitados sorpresas en esos bailes.

¡Es una historia de otro mundo! Un libro con una trama maravillosa que recomendaría hasta con los ojos vendados. Ojala se animen a descubrirlo, estoy segura de que los atrapara tanto como lo ha hecho conmigo.

Lo dejo a su criterio queridos lectores, nos estamos leyendo hasta la próxima reseña.

Que la fuerza este siempre de su lado. 

Algo que me gusta hacer, de vez en cuando, es elegir libros de temáticas distintas a las que suelo leer a menudo. Gracias a esta práctica, consigo salir de mi zona de confort y renovarme completamente, evitando que los libros del mismo género se hagan repetitivos.

En "un cielo de sueños dorados" conoceremos a Lou. Lou es la segunda hija de una familia de ocho hermanos. Nos encontramos en los años 30, una época donde existen grandes distinciones sociales. Los más ricos son libres, pueden hacer lo que quieran. Se divierten y realizan fiestas en sus mansiones hasta altas horas de la madrugada. Los más pobres deben seguir las tradiciones. Si eres mujer, debes casarte a una edad concreta. Tu deber será cuidar de la casa y de tus hijos. No hay libertad, todo está planeado con antelación. Pero Lou es distinta. Está harta de la monotonía y de tener que estar atada a las normas y tradiciones de casa. Ella quiere ser libre.

Para ello, aprovecha sus momentos en soledad para escapar y escribir novelas de misterio en la mansión de los Cardew. Este lugar lleva años abandonado. Y pasar tiempo entre sus paredes, la ayuda a salir de la rutina imaginando un tipo de vida distinta a la suya. Pero lo que Lou no se esperaba es que un día los dueños regresarán a su hogar y la pillaran con las manos en la masa tocando sus cosas.

Hasta aquí puedo decir. Para saber más, tendréis que leer la historia completa.

Tengo de confesaros que tenía un poco de miedo cuando empecé a leer esta historia. al no ser un género que lea a menudo, no quería ir con muchas expectativas por si acaso. Pero al final, mis temores no se han cumplido. La historia me ha encantado y sin duda, se ha vuelto una de mis mejores lecturas del mes.

Me ha gustado mucho la prosa de Laura Wood. Es sencilla, cercana y directa. Gracias a las descripciones cortas que utiliza Laura consigue crear una ambientación maravillosa. Te traslada a los años treinta, logrando que seas uno más de los invitados de las fiestas de la familia Cardew. Es imposible no imaginarte dentro de esas fiestas lujosas, llenas de joyas y gente elegante. Bailando jazz hasta altas horas de la madrugada.

El libro estará narrado en primera persona. A través del punto de vista de Lou. Lou ha resultado ser un personaje de lo más intrigante. Me gusta su forma de pensar y de actuar. Es directa y sincera. Aunque a veces, no puede evitar sentirse apartada al no pertenecer a este mundo tan lujoso y elegante.

Los capítulos cortos que tiene el libro hacen que según avances la historia, te atrape cada vez más. Tienes curiosidad de saber cómo se adaptará Lou a este nuevo estilo de vida. Aunque lo más importante serán los secretos que esconden los personajes.

Me ha gustado mucho como ha representado la autora a los Cardew y su mundo. Gente rica que vive una vida de lujo, llena de caprichos. Pero detrás de esa perfección, se encuentra la infelicidad. Ya lo decía el dicho “el dinero no da la felicidad”. Y eso es justo lo que iremos descubriendo con el paso de las hojas. En este mundo la gente finge ser alguien que no es, aparentan y mienten. Es impresionante descubrir cuáles son sus verdaderos yo.

Ya os he dicho que la ambientación es maravillosa ¿no?

Pero además de disfrutar de esas fiestas de lujo, viajaremos a Londres. Visitaremos sus calles y alguna que otra tienda de ropa, de los más especiales. Es imposible no ponerse en la piel de Lou y sentirse como en un sueño del que no queremos despertar.

Sobre la parte romántica del libro, deciros que me ha encantado. La relación entre nuestra pareja es muy dulce. Se va desarrollando poco a poco. Primero con peleas, luego con miradas furtivas y finalmente, su amistad pasará a ser algo más profundo. Pero, ya os digo que no todo será perfecto. Y encontrar la felicidad a veces se volverá un camino realmente duro.

Uno de los temas que se tratan en el libro es el de las apariencias. Es curioso como queremos dar una imagen en sociedad pero luego, realmente, son pocas las personas que nos conocen realmente. A través del personaje de Lou, veremos los cambios que existen dependiendo del tipo de clase al que pertenezcas. al principio estará feliz. Tendrá todo lo que nunca tuvo. Pero con el tiempo, se dará cuenta de que ese tipo de vida no es tan perfecta como se ve desde fuera.

Se hablará sobre la importancia de aprender a tomar decisiones y sobre lo fundamental que es creer en uno mismo. A veces podemos tener un potencial que desconocemos. No hay que envidiar a los demás, si no confiar en nuestras habilidades y luchar por nuestros sueños.

Sobre los personajes, decir que cada uno ha conseguido que le tome cariño, a su manera claro. Todos son diferentes. Con personalidades y comportamientos muy especiales y extravagantes.

Loise es una chica sincera y directa. Pero ahora mismo, se encuentra perdida y sin saber cuál es el camino que debe seguir.

Caitlin es hiperactiva y está llena de energía. Es como un torbellino y una auténtica maestra en el arte de organizar fiestas con buen gusto.

Robert es un poco gruñón y borde. Pero es de esos personajes que consiguen ganarse tu corazón con el paso de las hojas

Y como estos, tenemos mucho más personajes. Os ánimo a descubrirlos.

En conclusión, "un cielo de sueños dorados" ha sido una lectura diferente. Me ha ayudado a salir de mi zona de confort, a descubrir una temática nueva que puede que nunca me hubiese atrevido a tocar directamente.

A través de sus páginas, sentirás que viajas a los años 30. A esas fiestas tan lujosas y tan llenos de encantó. Abarrotadas de gente interesante con la que hablar o, simplemente, con la que bailar hasta quemar la pista de baile. También aprenderemos grandes lecciones, como que las apariencias engañan, que el dinero no trae la verdadera felicidad y que siempre hay que confiar y creer en uno mismo. Sin duda, una lectura que os recomiendo mucho. No os defraudará.

Después de leer este libro, me quedo con ganas de leer una en las novelas con las que se compara está lectura, El gran Gatsby. Espero poder hincare el diente algún día.
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Díganme que esta portada no es la cosa más bella del mundo. Yo la vi y quedé enamorado, luego me enteré que es un coming of age histórico ideal para los amantes de El gran Gatsby y, aunque nunca hubiera leído ese libro, yo estaba mega abordo, jaja.

Lou es una chica poco común, le encanta leer, escribir, las cosas sofisticadas y está obsesionada con la mansión Cardew, aquella que está separada de todo el pueblo y lleva años abandonada. Es ahí donde Lou ve una oportunidad para escapar y tener un espacio propio, así que irrumpe en la mansión y se pone tan cómoda que incluso come sus manzanas y lee sus libros. Un día pasa lo impensable, los Cardew regresan a la mansión y, con ellos, pierde la poca libertad que había conseguido. Pero, de alguna extraña manera, Lou termina relacionándose con Robert, el hermano mayor y dueño de la casa, y se ve envuelta en un mundo con el que solo se atrevía a soñar: vestidos finos, fiestas elegantes, comida refinada y noches interminables. Mientras más tiempo pasa en la mansión y con los hermanos, Lou no puede evitar descubrir que están ocultando un secreto y no está segura si quiere saber lo que es o prefiere seguir aparentando que todo es un sueño.

Esa sinopsis es básicamente nuestra trama, una chica pobre que sueña con una vida que no puede tener y a la que, por azares del destino, se le abre la puerta de lo que siempre ha soñado y no duda en tomar la oportunidad de ir a las fiestas de los Cardew, la familia rica y famosa del pueblo con la que Lou y su hermana están obsesionadas y saben casi todos los detalles de sus vidas. Y pues ya, creo que no hay mucho más que comentar, tenemos una trama bastante simple, que fluye y funciona bastante bien, pero que no ofrece nada novedoso o que logre crear un impacto, es una trama más del montón de libros juveniles, salvo que estamos en el siglo XX.

Se apuesta a que los personajes carguen con la historia, pero no logran hacerlo y, aunque son muy distintos unos de los otros, todos son bastante planos y se nota que están hechos para crear contrastes entre ellos.
Louise, nuestra protagonista. Es una chica de 17 que no sabe lo que quiere de su vida. Está segura que casarse no es una opción para ella y el pequeño pueblo donde vive comienza a sofocarla y siente que sus condiciones (vivir en una granja y ser mujer) no le permiten soñar con ser más, así que cuando los Cardew la invitan a sus fiestas decide tomar la oportunidad para tener, aunque sea por un verano, lo que nunca podrá y siempre ha querido. La sentí bastante egoísta, pero en realidad nunca pude culparla por sentirse asfixiada y dejarse deslumbrar por los lujos y, aunque logré entenderla, nunca empaticé o conecté realmente con ella. En fin, creo que está bastante vacía a pesar de ser inteligente, intrépida y varias cosas más que son disruptivas de la época porque siento que se avergüenza de sus orígenes y a la primera de cambio le da la espalda a su familia, por lo que no entraría en la clase de protagonistas que valoro o aprecio.

Los ricos, enigmáticos y famosos hermanos Cardew. Son un par de jóvenes que se han visto golpeados por la tragedia varias veces, primero pierden a su madre y varios años después a su padre. Robert, el mayor, se ve obligado a tomar el control de familia, proteger a su hermana y madurar de manera repentina, convirtiéndolo en un joven serio, reservado, hermético y, hasta cierto punto, frío, y nunca me gustó, hasta llegó a causarme repulsión por lo distante, maduro e intelectual que intentaba mostrarse porque era obvio que es una máscara y que intenta ocultar algo. hasta Por su parte, Caitlin, la menor, es desenfrenada, se la vive de fiesta en fiesta y no parece preocuparse por su futuro o la reputación de su familia y lo único que le interesa es planear su próxima fiesta, con ella fue con la que más pude empatizar porque se me hizo un personaje muy divertido y con mucha inocencia. Estos dos son más transparentes que el agua de río y el "misticismo" que la autora les quiere asignar queda opacado por lo cliché que resulta su construcción.
La familia de Louise. Viven de manera acomodada, son muchos, pero son la cosa más bella de todas: son unidos, no se juzgan entre ellos y, lo más importante, están para apoyarse sin importar qué. Me parece que Louise debería sentirse orgullosa de pertenecer a una familia como la suya en lugar de sentir pena por lo que no tiene.

Siento que realmente no hay mucho por comentar, todo me pareció muy rosa o, mejor dicho, dorado, ya que la autora ABUSA de esta palabra (si hiciéramos un shot game por cada vez que aparece, terminaríamos ebrios en los primeros capítulos, equis, sigamos, jsjs). Sí, tenemos un par de temas controversiales para la época, pero se mencionan bastante de pasada y no se hace mucho hincapié sino hasta el final del libro y, honestamente, para ese punto, ya no creo que encajaran en lo más mínimo; el que más rescato y que siempre agradezco en cualquier libro es la crítica al rol de la mujer en la sociedad, en especial en aquellas donde el ser mujer te limitaba a casarte y tener hijos.

Lo que rescato mucho es la narrativa, tenemos una excelente ambientación, pude sentirme envuelto en el glamour de las fiestas de los Cardew y al mismo tiempo sentir la calidez de la granja de la familia de Lou y la cotidianeidad de sus acciones. Lo malo de tener muy buena ambientación, es que se deja de lado la construcción de la trama y no hay ese pequeño cliffhanger ni el suspenso de saber qué pasará, vamos a lo seguro, simplemente nos la vivimos de fiesta en fiesta con Lou y Caitlin, esperando a que amanezca.

En resumen, Un cielo de sueños dorados, es una historia simple, sencilla, con buena ambientación y personajes que cumplen su función, pero que no ofrece nada novedoso, no llega a crear un impacto ni dejar un mensaje. Solo sirve para pasar el rato y descansar entre otras lecturas.

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RESEÑA CORTA:
Me siento abrumada después de cerrar el libro, un retelling de El Gran Gatsby con ese aire agridulce que te hace no saber del todo que pensar.

No sé cómo puntuarlo realmente. Es un libro que me parece maravillosamente escrito y que deja mensajes muy importantes. Una historia agridulce con final feliz. Lo he disfrutado mucho pero a la vez me he tirado gran parte del libro con un sentimiento un tanto angustiante por los secretos y ese mundo que se ve tan esplendoroso pero que me daba tan mala espina. No obstante ese es el objetivo y por eso me parece una maravilla de libro.

El final ha sido precioso pero le dejó solo 4 estrellas porque es mi sentimiento final. al libro no le encuentro fallo pero esa sensación agridulce me ha hecho que no lo disfrutarás tantísimo (a pesar de ser ese su valor). Es un poco raro, la verdad, pero como la historia en la que se basa.

RESEÑA LARGA (link):

Un cielo de sueños dorados es un retelling de El Gran Gatsby que, si bien no he leído la historia original ni recuerdo si vi la película, sí que tiene unos tintes muy similares así como sigue la historia de persona que se encuentran con un nuevo mundo de fiestas y extravagancias muy atractivos. Es una historia cuanto menos curiosa que sin duda le encantará a los fans de la historia original.

Esta es una de esas historias de las que no sabes del todo que esperar ni qué pensar, pues transcurre todo entre un velo de misterio y semi droga en este nuevo mundo que se le abre a la protagonista. Lou es una chica de pueblo soñadora que de repente ve como su mundo cambia cuando Alice, su hermana y confidente, se casa. A partir de ahí Lou empieza a agobiarse por los cambios y porque se espere que ella siga el mismo camino que su hermana. Pero antes de que dé tiempo a profundizar más en esos sentimientos, rápidamente se ve atraída hacia los hermanos Cardew que han llegado de Londres y hacen fiestas extravagantes a las que de repente se ha visto invitada. Es ahí cuando la protagonista entra en un mundo totalmente nuevo, a través del cual se deja seducir pero sin dejar que la cambie del todo, aunque poco a poco sí que irá descubriendo más y eso hace que evolucione de una u otra manera.

Lou es una protagonista bastante ideal en el sentido de que se deja llevar por la vorágine pero sin perder su esencia, solo transformándola hacia su verdadero ser. Es un personaje que te guía fácilmente por la historia y te transmite la atracción hacia este nuevo mundo. En cierta manera me ha costado conectar un poco con todos pero es con Lou con la que más angustia sentía, pues veía como abandonaba en cierta manera a su familia para estar de fiesta, como ansiaba ver más, como iba separando sus vidas y lo cierto es que durante parte del libro he tenido un sentimiento agridulce no solo por como se dejaba de lado su vida y su familia sino como las fiestas y la gente era tan despampanante pero fría y siempre lo mismo. Es la sensación de cuando ves algo muy bonito pero el interior está hueco. Es a ese mundo en el que se aventuraba lo que me dejaba con sensaciones extrañas, pero considero ese el punto distintivo de la historia y lo que realmente se quiere transmitir, pues sí que te hace reflexionar mucho sobre como vivimos la vida.

En cuanto a los otros personajes, son los hermanos Cardew los que se llevan el resto de la historia, presentando a dos hermanos que organizan fiestas pero que se ve que hay mucho más en ellos que dos personas ricas. Y es ahí donde se crea el misterio y la tensión de la historia, pues se crea otro velo extraño del que no sabes como vas a salir. Caitlin es una chica fiestera cuya comentario similar a "se puede ser infeliz en cualquier lado" es lo que la define. Por su lado, Robert es un personaje que me dio mucha curiosidad desde el inicio al estar siempre tan aburrido en esas fiestas que parecen tan divertidas. Los hermanos Cardew no son como se presentan a simple vista y me ha gustado mucho ir indagando poco a poco en ellos, como muy lentamente se empieza a caer el velo para descubrir qué es lo que se esconde entre tanta fiesta y alcohol.

La verdad es que la historia me ha sorprendido muchísimo y ahora que estoy evaluándolo todo, me está gustando más. Sí que es cierto que durante gran parte del libro me he encontrado con sentimientos encontrados porque no sabía por donde iban a salir los tiros y porque te hace reflexionar de una manera que a veces te pone triste. No obstante la historia es muy buena, tiene grandes mensajes y la profundidad de los personajes me ha sorprendido mucho. Es una pena que no pueda hablaros más de ellos por spoilers pero me ha gustado ese cambio de sentimientos que iba teniendo con ellos y la forma en la que se soluciona todo al final me ha dejado con la sensación final perfecta y no esa mezcla agridulce que tuve durante todo el libro.

Este es un libro que me resulta muy difícil de puntuar pues la puntuación iba a ir según el final y me ha parecido perfecto para todas las dudas que tenía. Sin embargo no se lleva el 5 por ese sentimiento angustiante que he tenido durante parte del libro, que si bien es lo intencionado con la historia, me deja un feeling confuso.

Un cielo de sueños dorados es un libro especial y cuidado. La prosa de la autora es delicada así como la construcción de los personajes, llevando a una trama basada en El Gran Gatsby que trae sentimientos encontrados y muy buenos mensajes. Sin duda os la recomiendo.


Artículo original: https://librosdelcielo.blogspot.com/2021/04/un-cielo-de-suenos-dorados-de-laura-wood.html
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Es el verano de 1929 en un pequeño pueblo de Cornualles. La hermana de Lou está a punto de casarse, dejándola como hermana mayor en la casa familiar y perdiendo así la presencia constante de su mejor amiga. Ambas habían estado siempre obsesionadas con la mansión de los Cardew y, en su recién estrenada soledad, Lou se colará en una de las fiestas de la casa, dando comienzo a un verano que cambiará su vida por completo.

Desde que supe de la existencia de este libro, supe que tenía que leerlo. Soy muy fan de la década de los veinte. Siempre me ha resultado fascinante. También soy una fan incondicional de El gran Gatsby, así que no me podía resistir a un libro que tenía una ambientación que se antojaba tan Gatsby. Y ya os prometo que ha sido todo lo que estaba esperando y mucho más.

La historia nos sitúa en junio de 1929, justo en el día en el que se celebra la boda de la hermana de Lou. La joven no tiene más amigos que su hermana, por lo que la soledad la golpea con fuerza cuando su hermana se marcha a vivir con su marido. Ese verano, después de que la mansión Cardew llevase vacía desde la muerte del padre de la familia, la casa vuelve a llenarse de vida con la llegada de los dos hermanos Cardew, que han huido de Londres para pasar esos meses de calor. La vida ha vuelto a la mansión y las noches se llenan de música y fiestas. Y en una de esas fiestas es cuando Lou conoce a los hermanos, haciéndose un hueco en sus vidas y comenzando un verano que se presenta inolvidable.

Lou, como protagonista, me ha encantado. A sus diecisiete años y con la boda de su hermana, comienza a sentir la presión de encontrar a alguien con quién casarse más pronto que tarde. Pero es lo último que ella desea. Lou es una chica fuerte e independiente, le encanta escribir sus propias historias, la libertad del mar, y su sueño es hacer algo con su vida más allá de ser el ama de casa que la sociedad espera de ella. Conocer a los Cardew, a gente de ciudad que son tan diferentes a todo lo que conoce, le dará unas perspectivas que la harán cambiar y evolucionar. Me ha gustado mucho todo el recorrido que hace, todo lo que va aprendiendo, cómo va cambiando y la Lou en la que se convierte al final. Es un personaje excelente, que debe descubrir quién es en realidad.

Es una novela con una gran cantidad de personajes que no dejan indiferente. La familia de Lou no tiene demasiado protagonismo presencial, pero serán esenciales para ver cómo es su vida real y la forma en la que ella encaja en esa familia. A mí me han encantado todos. Son una familia bastante liberal, que no se dejan controlar demasiado por las convenciones sociales de la época. Aunque también hay algún miembro que sí representa lo que se espera de una señorita en ese momento histórico. Ellos son los que han hecho que Lou sea como es.

El elenco que más aparece es el que viene del mundo de fiestas y dinero de los Cardew. Los dos hermanos son jóvenes sofisticados y educados, que parecen salidos de otro mundo para nuestra protagonista. Robert es el más maduro y responsable de los dos. Es el que lleva las finanzas de la familia y el que se ocupa de su hermana. También le concede todos sus caprichos. Y además es un poco imbécil, si le preguntas a Lou. Caitlin es una joven despreocupada, que vive la vida con intensidad, con alegría, rodeada de personas a las que les gusta divertirse tanto como ella. En un principio, ambos parecen bastante superficiales, pero la autora hace un trabajo excelente con su construcción e ir conociéndolos poco a poco ha sido una maravilla. Ambos hermanos me han llegado mucho.

Y luego tendremos a todas esas personas que van acudiendo a las fiestas, con un estrecho grupo que serán los que más aparezcan, formando parte de las amistades íntimas de los dos hermanos. Ha sido fácil conocerles y empatizar con ellos. Me han gustado mucho y creo que han aportado mucha riqueza a la historia que la autora quería contar.

Esta historia utiliza esa frivolidad de las fiestas y el lujo para hablar de temas muy importantes. Es una historia sobre conocerse a uno mismo, sobre probar cosas y analizarlas, sobre tener valor para aceptar lo que queremos y descubrir si queremos actuar en consecuencia o dejarnos arrastrar por los convencionalismos sociales. Es una historia donde el tema de la familia es esencial, tratándose desde puntos de vista muy interesantes. Y en la que la amistad supone el pilar fundamental de la existencia. Es una novela sobre aprender, crecer y evolucionar. Sobre madurar y descubrir lo que es convertirse en adulto. Y todo ello yendo de fiesta en fiesta y de merienda en merienda. Con un regusto que augura un desastre. Estuve durante toda la novela con un puño en el corazón, esperando algo malo, supongo que también sugestionada por el toque Gatsby. Pero llegando al final y descubriendo una gran historia que he adorado de principio a fin.

Me gustaría hacer también hincapié en la maravillosa ambientación de la novela. La autora hace un trabajo excepcional y casi sentía que estaba también disfrutando esas fiestas y viviendo esos sueños dorados. La mansión, la música, los vestidos, la juventud, la libertad, las tardes en la playa, los desayunos con resaca… Todo estaba descrito de una forma que no se hacía pesada, pero que sin duda resultaba inmersiva y atrapaba por completo. Ha sido una experiencia muy visual.

En cuanto a la narración, es Lou la que contará la historia en primera persona. Me ha gustado mucho. Primero porque Lou es escritora, lo que da libertad a la autora para darle una voz un tanto poética y mágica a la hora de describirnos lo que iba pasando. Segundo porque ella es la que pasa por la mayor evolución y ser tan cercana al proceso que iba llevándose en ella ayudaba a entender mejor todo lo que estaba pasando. Los capítulos no son especialmente cortos, pero se leían en nada. Todo fluía sin esfuerzo. Es una maravilla.
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