Las sangres

He dudado mucho si reseñar, o no, este título, fundamentalmente porque me resultaba muy difícil hacerlo por su complejidad, y más aún recomendarlo abiertamente. Es una historia rara, diferente y original, que puede o gustar o provocar todo lo contrario, aunque no creo que deje indiferente a quien lo lea. Además su autora escribe de forma deliciosa y elegante, lo que hace que avances rápido absorbiendo todo lo que quiere transmitir.

"Las sangres" parte de la esencia del cuento clásico de Barba Azul de Perrault, que posteriormente ha sido objeto de numerosas variaciones. La historia nos hablaba de un hombre terrible cuya máxima virtud era su riqueza, pues ni era bello ni era bueno. al comienzo de la historia vemos que busca nueva esposa y que, tras desposarse de nuevo, ésta se va a vivir con él. El problema llega cuando éste se marcha de viaje y la deja a cargo de toda la casa, con la prohibición de que no entre en una de las habitaciones que están cerradas porque de hacerlo, acabará con su vida. Sin embargo a ella le puede la curiosidad y entra, descubriendo así los numerosos cadáveres de las otras esposas desaparecidas y confirmando lo que todo el mundo temía, que su marido era un monstruo.

En este caso, su autora quiere darle una vuelta al cuento clásico, tornándolo mucho más complejo y oscuro. Pues descubrimos a Féléor, un nuevo "Barba Azul" mucho más refinado, bello y rico. Un hombre que parece atraer la mirada de las mujeres, y al que conoceremos a través de los diarios de las siete mujeres que formarán parte de su vida como esposas.

La primera mujer es la que nos descubre un joven de admirable belleza y elegancia, excepto por su gusto por la carne cruda. Es impecable y exquisito en sus movimientos y actos, ni siquiera nos produce rechazo, en un principio, sino todo lo contrario...aunque habrá que ver hacia dónde evoluciona. Y de eso, seremos participes directos a través de las opiniones que dan de él sus mujeres. Percibiremos, casi con horror, una evolución que cada vez se vuelve más oscura y sangrienta.

Lo verdaderamente interesante es que desde el primer momento su autora juega a hacernos dudar de si realmente Féléor es un monstruo, si él nace así o son ellas las que le empujan a comportarse de esa forma tan brutal. Para comprender esta evolución y reflexionar sobre ella hay que leer estos siete diarios femeninos, que nos van adentrando en una narración cada vez más complicada, más salvaje. Las historias se vuelven más fascinantemente macabras y oscuras. Repletas de muerte, sangre y sexo.

"No sabe cuando llegará la petición, pero sabe que llegará. Para él es peor esperar sin hacer nada. A mí, sin embargo me da un poder muy grande. Él me estrangula en la cama y, sin embargo, soy yo la que lo domina. Soy yo la que elegirá el momento de su deleite absoluto y, mientras tanto, lo único que puede hacer es acostarse conmigo con la esperanza de que dicho momento no tarde en llegar. Porque no me matará sin que yo se lo pida."

Cuando digo que no es una lectura para todo el mundo lo hago, no refiriéndome a las posibles muertes de estas mujeres, sino a otro tipo de temas que se tocan. Por poner un ejemplo, se habla de la búsqueda de placer a través del sexo, pero también del sexo con dolor para conseguir el máximo goce. Incluso del goce que podría provocar el dejarse matar por la persona amada.

Cada una de estas esposas le enseña algo diferente a Féléor, le van moldeando hasta convertirle en el hombre viejo que conocemos al final del libro. Un hombre que relee esos diarios y las notas que añadió sobre cada una de esas siete experiencias. Seremos partícipes de esas siete muertes diferentes, cada una en su estilo. Y una a una nos vamos preguntando qué les lleva a unirse a un hombre que acabará por quitarles la vida, ¿qué buscan exponiéndose a una muerte segura? Las diferentes respuestas a esta pregunta serán las que aporten el punto original, sorprendiéndonos con sus motivos y la forma en la que lo justifican. Lo que nos hará plantearnos si es lícito dejar que ellas decidan su propio destino, o habría que interponerse a él.

"Las sangres" ha resultado ser una experiencia en sí misma, he disfrutado muchísimo de la bella forma de narrar de su autora y de cómo a través de un cuento clásico nos permite reflexionar sobre temas como el amor y los celos enfermizos, la ansiedad ante la sangre, la búsqueda del placer sexual de otras maneras a las habituales, y también de los motivos personales de cada una de sus protagonistas. de cómo les influía lo que había pasado con las anteriores.

Me parece una título que es imposible que nos deje indiferente si escarbamos en lo que quiere transmitir su autora. Y no puedo estar más de acuerdo con el hecho de que se le compare con "El perfume", porque es la misma sensación la que provoca esta lectura. Es fascinación y repulsa al mismo tiempo.
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