Hacía tiempo que le tenía echado el ojo a esta maravilla y, una vez visto en casa con calma, me ha parecido espectacular. Y la edición, de Astronave, magnífica como siempre. Una auténtica joya de la divulgación científica para niños, en formato cómic, en la que el esqueleto humano, a modo de presentador, nos conduce a través de una peculiar obra de teatro llena de humor y que además de enseñar, entretiene y engancha. Tan pormenorizado que será sin duda una de esas obras que crecen con el niño, ya que según sus conocimientos y madurez le permitirán ir poco a poco abarcando todo lo que cuenta. Cada acto de la obra está dedicado a un aparato o sistema, desgranándolo en profundidad y con desparpajo para que podamos conocer a fondo cómo funciona y quién interviene. En resumen, una preciosidad de cómic que resulta didáctico, divertido, riguroso y ameno. Se va de cabeza a mis imprescindibles para niños (y no tan niños 😏). |