El Orbe de los Dragones

Narrativa:
La escritura es bastante amena, sencilla y llevadera. Las autoras no se detienen en extensas descripciones ni largas metáforas o comparaciones. Lo que me hubiera gustado ver más son los sentimientos o emociones de los personajes, ya que sentí que estaban muy por encima y no se logra profundizar mucho con ellos, más allá de que son como diez personajes.



Mi opinión:
Me gustó bastante la historia. Como cuenta la sinopsis, Kitiara es mandada por su General en una misión que llevaría a la destrucción de los caballeros solámnicos, como de Solamnia, sin que ellos tuvieran que mover un dedo. En el camino, Kit se entera que sus amigos de la infancia tomaron parte en la guerra que se está desarrollando, y se encuentran en contra de ella. Además, se entera que su amor, Tanis, está reunido con una antigua comprometida, y los celos la controlan. Desde ese momento, Kitiara derrapa. Me gustó bastante ver cómo un personaje tan fuerte, altivo y controlador como ella se deja llevar por las emociones y es tan humana como cualquiera de nosotros.
Derek fue uno de mis personajes favoritos, porque lo odié. Es tan testarudo, cerrado y molesto que me daban ganas de golpearlo. Pero, creo, uno de los personajes más logrados en la novela. Además de Tasslehoff, claro, que cada vez que aparece me hace reír demasiado y lo amo más que a nada. Los demás me encantaron por igual. Pero algo que tengo que resaltar, es que me gustó que fueran reales. Todos ellos eran fuertes, decididos, testarudos, pero todos tuvieron sus momentos de miedo, de duda, de temor, de celos, derraparon y erraron como cualquiera de nosotros. No eran supremos y perfectos, eran humanos, y eso fue un punto extra.
Hubo un par de puntos que no me gustaron mucho. Hay algunas relaciones demasiado fugaces, que se muestran como al pasar, al que los personajes les dan mucha importancia. Insta love, para dar un ejemplo. Y eso me dejó un mal sabor de boca. Me hubiera gustado que se profundizara un poco más en ellas. El libro ya tiene 500 páginas con una letra bastante pequeña, no costaba nada agregar algunas más para que fuera perfecto. Además, como dije, sentí que no lograba conectar del todo con los personajes. Más que pensamientos y sentimientos cortos, no conocemos mucho más de ellos y también me dejó un mal sabor. Pero en cierto punto lo entiendo, porque en la mayoría de las escenas intervienen alrededor de diez personajes y se vuelve bastante complicado. Kitiara es la que se ve en mayor profundidad y eso es, claro, porque es la principal de este libro. Pero los demás también tienen varios capítulos importantes, y me hubiese gustado conocer más de ellos.
Más allá de todo eso, la historia me gustó mucho. En tan solo 500 páginas viajamos por muchos lugares, nos encontramos en una ciudad de caballeros, pasamos a campamentos de guerra, glaciares, campos, templos. Vemos dragones, miles de razas, lobos, guardianes mágicos y mucha pero mucha magia. Fue completamente una historia de fantasía épica que te transporta a un mundo mágico e increíble. Hubo varias escenas que fueron muy buenas, y muchas que hacían varios guiños o representaban varios aspectos de la vida que me gustaron bastante.
Me gusta muchísimo la saga Dragonlance no solo por su extensión y la basta imaginación de sus autoras, sino porque abarca muchísimos temas de la vida, de la magia, del mundo y es un género que a mí me gusta muchísimo y se ve muy eclipsado por el YA.
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