La Ciudad Justa

Atenea ha decidido crear La ciudad Justa, una ciudad basada en La República de Platón.
Ha seleccionado a personas de distintas épocas que en algún momento le han rezado pidiendo algo similar para que le ayuden a crearla. Estos serán los patrones.
Además, ha escogido unas máquinas, llamadas trabajadores, para que realicen las tareas más pesadas y rutinarias y ha adquirido a muchos niños esclavos que serán los que realmente crezcan con el sistema de la República.
En principio todo parece ideal pero...
¿Realmente lo es?
La idea del libro me parece realmente interesante y me ha gustado bastante todo el tema de cómo iban creando la ciudad y las leyes que se iban aplicando.
Veremos la historia contada desde tres puntos de vista: La primera, desde el punto de vista de Apolo, que se ha reencarnado en humano y vivirá la experiencia como un niño; la segunda, desde el punto de vista de Maya, que tendrá el papel de patrona y la tercera, desde el punto de vista de Simmea, una niña esclava comprada para el experimento.
He de decir que yo no he leído La República de Platón, es más, la filosofía no es lo mío y, de hecho, creo que ese ha sido mi mayor problema al leer este libro.
Como os digo, el argumento me parece interesante pero la forma de plantearlo es totalmente filosófica, cosa que si lo piensas es lógico, pero que a mí no me ha gustado nada.
Se me ha hecho una lectura lenta y tediosa y, si no llega a ser por mi cabezonería de tener que acabar todos los libros, dudo mucho que lo hubiera terminado. También puede ser que mi momento personal no ayudara a su lectura.
Lo hemos leído en el club de lectura y les ha gustado a todas menos a otra persona y a mi, por lo que bien creo que el problema es simplemente que no es un libro para mí, pero eso no significa que sea un mal libro.
En definitiva, un libro perfecto para el que le guste la filosofía y darle muchas vueltas a la cabeza.
Eso sí, la edición me ha parecido maravillosa.