Asesinato en la Biblioteca Nacional

Tal y como se deduce de su título, se trata de una novela policíaca en la que dos periodistas también juegan un papel importante (me ha recordado a muchas novelas nórdicas en las que en toda investigación aparecen dos partes: policías y periodistas). La premisa en sí es buena y puede mantener al lector enganchado hasta prácticamente el final. A pesar de esta buena trama, no me ha gustado el tratamiento que se le da a la mujer en algunas ocasiones.

Aunque es una lectura recomendada para niños de entre 12 y 14 años, creo que es más adecuada a partir de los 13 o incluso los 14 años, y ello porque la autora utiliza un vocabulario bastante rebuscado para esa edad. Aunque es cierto que los niños deben acostumbrarse a utilizar el diccionario y a deducir el significado de las palabras por su contexto, creo que eso ralentiza mucho la lectura y que habría sido mucho más ágil si se hubiese empleado un lenguaje más próximo a los niños de estas edades.

En lo relativo a la edición, la portada es sencilla, pero encaja muy bien con el género, sin embargo, lo que no me ha gustado es que solo haya cuatro capítulos. No obstante, estos capítulos se subdividen con unas estrellitas y un espacio en blanco, pero creo que resulta insuficiente y que habría sido mucho más dinámica la lectura si lo hiciese en capítulos breves.

En definitiva, no es una lectura que les pueda gustar a todos los niños, sobre todo por el vocabulario utilizado, y la trama también es algo compleja.