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Maravillosa novela de aventuras. Lectura en voz alta con mi hijo de 7 años. Hay un naufragio, hay piratas, hay supervivencia, no falta nada. Lo mejor es el manejo de la tensión, el suspense de Hitchcock. Julio Verne es magistral en la modulación. Cada párrafo vuelca el interés al siguiente, es inevitable. Aunque a veces exagera un poco. La curiosidad no para de crecer, pero de tanto estirarla, se afloja. Que lo diga de una buena vez. Eso me reclamaba mi hijo cuando Verne ocultaba una revelación clave de la novela, nada menos que la causa del naufragio. El cultivo de la amistad, del compañerismo, de cierta nobleza, están muy bien logrados. Es un libro altivo. Celebra el genio francés, aunque también el inglés -con algunas escaramuzas de por medio- y el norteamericano. Hay también mucha geografía poética. Menciona Argentina varias veces. En esta edición hace bastante ruido la traducción española cerrada, hay muchas expresiones que tuve que cambiar en la lectura en voz alta para no sonar como el original de Fuenteovejuna. Voy por otro libro de Julio Verne, un festival para chicos y grandes.
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