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Irlanda es una novela romántica situada históricamente desde antes de la 1ª GM (1913), hasta 1919. A caballo entre la Isla Esmeralda y Nueva York, nos narra la historia de amor entre el multimillonario Sean O'Callaghan (americano-irlandés hijo de emigrantes) y la activista irlandesa Éireann O'Niall, una joven que debe ponerse al frente de su maltrecha familia. Ambos protagonistas tienen intereses politicos comunes, pero personalidades y vidas antagónicas, además de una notable diferencia de edad. Además de su historia sentimental y los devenires de sus familias (la de Sean ya la conocimos en La princesa del millón de dólares), la autora mezcla hechos de ficción que podrían haber pasado y seguro que en muchos casos sucedieron , (encarcelamientos injustos, violencia policial y abusos de todo tipo) con momentos históricos como el "Domingo Sangriento" o el "Alzamiento de Pascua". Ambos personajes han ido calando en mí a lo largo de la historia, aunque confieso que no han llegado a enamorarme totalmente. Eiréann es un personaje admirable por su fortaleza y fuerza de voluntad, aunque a veces resulta demasiado seca e inexpresiva. Sean es más fácil de comprender y despierta más simpatía tanto por su pasado sentimental como por su sensibilidad, aunque para mí ha quedado algo eclipsado por la omnipresente figura de su cuñado Thomas Kavanagh, (protagonista de la princesa del millón de dólares, que recomiendo leer antes) y que aparece como secundario en Irlanda. Su relación es muy bonita, aunque con este marco histórico de fondo, que culminaría años después con la creación de la República independiente de Irlanda, pensaba que los protagonistas tendrían más peso específico en los hechos verídicos narrados. Los personajes secundarios constituyen según mi punto de vista, un buen elenco para aprovechar en posteriores historias, si así fuese el deseo de la autora. Me ha parecido un buen libro en su fondo y más que correcto en su forma, aunque a veces alguna palabra que se repite en exceso o alguna expresión muy típicamente española (que no le pega nada a un americano-irlandés) me hayan chirriado un poco. A pesar de estos detalles, le doy cuatro estrellas a este viaje a la rebelde, maravillosa e indómita Irlanda, tierra de contrastes tan pronunciados como las personalidades de los protagonistas de esta historia. Suerte que el amor no entiende de algunas cosas ;). Podéis leer más reseñas como esta en mi blog. |
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