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Marie no quiere pasar las fiestas navideñas con su familia en Londres, así que finge un resfriado para evitar ir. Stephen, su compañero de casa, tampoco quiere celebrar las fiestas en Glasgow con sus hermanastros, así que le dice a su madre que se ha roto una pierna. Y no, no son dos adolescentes caprichosos, si no dos adultos en mitad de la treintena. Todo se complica cuando aparece en la casa uno de los odiados hermanastros de Stephen, con intenciones de llevarse a su díscolo hermanito, a rastras si hace falta. El serio abogado chocará, nada más llegar, con una loca ataviada con un pijama horroroso. He disfrutado mucho con la lectura de esta novela, que es fácil y rápida de leer, además de muy entretenida y divertida. También engancha un montón y tiene situaciones divertidas, pero a la vez otras tiernas y románticas. Este libro nos habla de segundas oportunidades y de lo importante que es tener el apoyo de la familia. El pero que le saco es que en ocasiones algunas situaciones eran un poco excesivas, el enamoramiento demasiado rápido y algunos comportamientos muy infantiles para la edad de los personajes. Pero da igual porque he disfrutado como una enana de la lectura. Azahara Vega tiene varios libros publicados, y os animo a que le deis una oportunidad a alguno, a este por ejemplo. |
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