El más bello amor. Una antología

Esta reseña tendrá varias opiniones poco populares, pero allá voy.

Empecé el libro con mucha emoción y quedé un poco decepcionada -la primera vez que vi esta antología en una de las librerías de mi ciudad, me obsesioné con su portada y con la descripción del contenido -cuentos de amor de autores clásicos, en la tradición del siglo XIX. Vaya qué prometía. No lo compré de inmediato porque el precio era bastante alto, pero después lo encontré en digital y sin tardarme, lo compré.

Creo que el principal problema que tuve con este libro -y lo he abordado en otras reseñas- es que actualmente los editores seleccionan un título y describen la premisa de una manera que no le hace justicia al libro, y éste fue el caso. Porque, ¿acaso el título El más Bello Amor no es indicativo de historias que si bien no necesariamente deben tener finales felices, si por lo menos deberían ser nostálgicas, enternecedoras? Yo creería que sí, pero quizá peco de inocente. Y la cuestión fue que la mitad de los cuentos de esta antología, si bien son buenos , no tienen nada que ver con el más bello amor. Son de hecho, historias bastante torcidas, largas, enfermizas, que si bien retratan fielmente la naturaleza humana, se alejan bastante del tema amoroso.

La antología se compone de doce cuentos, todos de autores europeos, y el que abre es La Muchacha de los Ojos de Oro de Honoré de Balzac. Es el texto más largo y el que sin duda, me predispuso contra el libro. Ahora bien, quizá muchos me odien por el siguiente comentario, pero el cuento me pareció fuera de contexto para la antología: las primeras no sé, veinte páginas, son una crítica social al París de mediados del siglo XIX. Y no lo niego, dicha crítica es interesante, completa, pero no me parece el cuento idóneo para abrir una antología sobre el amor. Y si alguien me pregunta, la verdad que con esfuerzos me acuerdo de cuál era la trama en sí -un dandy que se obsesiona con una mujer misteriosa, bellísima, que es mantenida bajo custodia por un amante celoso, y los esfuerzos que ambos hacen por conocerse. Sin ánimo de lanzar "spoilers", sólo diré que la cosa termina en tragedia.

A éste le siguen dos cuentos escalofriantes "La Muerta Enamorada" de Theóphile Gautier y Ligeia de Edgar Allan Poe. de nuevo, siento que ambas historias se alejan totalmente de la premisa del "bello amor" que nos promete el volumen, pero, y ya intentando superar esta parte de mi decepción como lectora, el texto de Gautier me encantó y el de Allan Poe no tanto. Creo que apenas me doy cuenta pero, las historias de vampiros no son creación literaria de Stoker ni Drácula su primer personaje; algunos años antes ya había antecedentes como en el cuento de Gautier, y vaya que resulta interesante. Esta historia sí me atrapó -un sacerdote seducido por una mujer bellísima que no es lo que parece -es un ente sobrenatural (tampoco es spoiler, esto nos lo dice el editor desde el principio). Lo que me gustó fue la construcción del texto y de los personajes.

El cuento de Poe es como Poe -obscuro, obsesivo, con un desenlace fatal. Y sí: el estadounidense no es de mis autores favoritos. Nada personal, creo que sencillamente, no me identifico con su estilo ni prosa. Lo reconozco como un clásico pero no es de mis favoritos.

Luego vienen algunas historias destacables y otras no tanto. Entre las memorables, me pareció que Zolá con Por una noche de amor, Proust con La confesión de una joven y obviamente, La dama del perrito de Chéjov son tremendas narraciones, si bien bastante trágicas y tristes. de toda la antología, creo que sólo Minué del bueno Guy de Maupassant es una historia de amor -nostálgica, sí - pero de una relación y una devoción pura del amor entre pareja.

Escribiendo esta reseña, me doy cuenta que puede decirse que en gran medida disfruté los cuentos de la antología de alguna u otra manera porque se trata de escritores clásicos y extraordinarios. Sin embargo, el hecho es que quizá me aferré a la idea -por el marketing, por el título, por la portada- de que era una compilación sobre un amor más, ¿romántico? No lo sé.