Bour-Tolán, Compendio de testimonios reptilianos

En Bour-Tolán nos encontramos con varios autores que se juntan para crear esta novela de ficción con mucho humor que bebe de las teorías de conspiración sobre la existencia de reptilianos en nuestro mundo.

El hilo principal nos cuenta la historia de Úrsula, una exmilitar que es perseguida por varios grupos mafiosos a los que ha estafado. Cansada de todo, tiene claro lo que quiere hacer: suicidarse. Pero lo hará de una forma un tanto… extraña. Incendiando el cementerio donde se encuentran las cenizas de su exmujer. Es ahí donde la encuentra Rayco, un hombrecillo que dice ir de parte de la Criptóloga y que tiene la misión de llevarse a Úrsula, que resulta ser, ante la sorpresa, negación y burla de la susodicha, una reptiliana.

Esta historia surrealista de Úrsula conociendo a la Criptóloga y ayudándola a llegar a la legendaria ciudad reptiliana Bour-Tolán, se intercala con testimonios recogidos por la Criptóloga sobre gente que afirma haber tenido encuentros con reptilianos.

Estos testimonios están escritos por diferentes autores, manteniendo todos ese tono sarcástico que es común en todo el libro.

Esta lectura no ha sido para nada lo que me esperaba, ha sido mil veces mejor.
Me he reído a carcajada limpia y he disfrutado de todas y cada una de las referencias a la cultura pop repartidas por la novela.

Los personajes que en esta nos encontramos son de lo más surrealista que he leído. Una panda de criaturas bordes, sarcásticas y, la mayor parte del tiempo, borrachas, que siguen hasta Indonesia a una mujer que quiere hablar con la comunidad reptiliana que allí reside para salvarla de un virus que está acabando con ellos.

En cuanto a los testimonios, mi preferido ha sido el primero, escrito por Isabel Galán, ya que tiene un toque de terror que te mantiene en tensión. Me parece un acierto haber intercalado la historia principal con estos capítulos.

Está claro que este libro es no es nada convencional. Para mí, que estoy acostumbrada a la fantasía young-adult, ha sido un soplo de aire fresco, un descanso de las novelas épicas y el romance, en el que me he encontrado muy cómoda, ya que es el tipo de humor que me gusta (si es que me das un par de referencias pop y personajes sarcásticos y me pierdo, que queréis).