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Tenemos la historia paralela de Flora Tristan (francesa militante socialista y feminista del siglo XIX) y de Paul Gauguin, el pintor, quien fue su nieto. Flora fue una pasionaria defensora de los obreros de origen peruano. Y Paul descubrió la pintura y abandonó su vida burguesa para instalarse en Tahiti donde vivió mal y murió de sífilis terciaria. |
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