Madre de dragones

Estaba buscando un libro de humor, y no tengo ni la más mínima idea de porque este libro estaba en esa categoría.

Ojo: si tiene algo risa, pero no para considerarlo como humor.

Pero aun así, tiene un contenido interesante que no paraba de leer, bueno, en ciertas ocasiones si se me hizo aburrido.

En fin, este libro va para aquellas mamás o papás frikis, y como salir adelante con sus hijos. La escritora te da varios consejos, herramientas y hasta recetas de como hacer una niñez impresionante para tus hijos.

Me mató la parte de los juegos, disfruté el contenido ya que la mayoría no lo sabía y ya me veo poniendo en práctica a mi sobrino.

Y lo interesante del libro es que te menciona con frecuencia, no olvidar esos días de fiestas y como pasarla bien con tu familia; unos de los ejemplos son: La navidad, halloween, día de pascua, entre otros. Y los días no festivos pero que deben ser recuerdos tuyos con los pequeños como: el raton perez/hada de los dientes.

Este libro ayuda a sacar lo máximo en la creatividad, de como hacer cumpleaños a lo grande, la decoración en días específicos y saber que a pesar de ser adultos, somos unos frikis con un niño interior que gozaremos más que los propios pequeños.

El libro tiene sus partes buenas, pero también tiene algunas partes meh, que no me va por ningun lado. Pero en general, se los recomiendo para aquellos padres con ganas de ser creativos o para jovenes con ganas de hacer algo chulo para sus sobrinos.

Escrito en primera persona desde el vista de una mamá friki, para otras que también lo sean o quieran serlo. Me he reído en algunos capítulos porque parecía que me estuvieran mirando por un agujerito, durante los cumples de los niños, las fiestas del cole, en las que siempre aparecía disfrazada, o con las comidas especiales de Navidad y Halloween.
He apuntado libros y películas, que siempre son una idea, pero el capítulo de los viajes me ha sobrado. Entiendo que alguien pueda visitar Japón y E.E.U.U. en una misma vida, pero no seré yo con mi mini sueldo. Todo lo que se refiere a mi ciudad ya lo hicimos cuando mis hijos eran más pequeños, pero seguro que cuando lleguen los sobrinos, volveremos otra vez a vivirlo todo. La verdad es que creatividad en mi familia sobra, pero también conozco a algunos amigos de mi hijo que tienen -2 en ese aspecto y no les vendría mal leerlo.
Un libro que pasa sin pena ni gloria, pero como se lee rápido no se pierde mucho, eso sí, sólo lo aconsejo a los muy frikis, porque habla de muchas cosas de las que, si no sigues determinadas series, no te vas a enterar.