Purgatorio

Diez personas se conocen en las peores circunstancias. Se despiertan en una sala con una alfombra roja situada en el centro. Encerrados en una habitación no entienden por qué están ahí. Así, comienza esta novela corta de suspense hasta el final. Un juego de mente perverso, un lucha por el premio final. ¡La libertad!

En este espectáculo de telerrealidad, ‘Purgatorio' no es una broma. Es un sencillo juego, con unas reglas parecidas al ‘Gran Hermano' que todos conocemos. Pero también con referencias a otra novela, ‘El fugitivo' de Stephen King, publicada bajo el seudónimo de Richard Bachman. Otra trilogía que me viene a la mente es ‘Los juegos del hambre' de Suzanne Collins.

Este juego pone de manifiesto una sociedad decadente y proclive a la excentricidad e intenta reflejar el ocaso de la televisión, el entretenimiento y la sociedad. Si bien es verdad que me ha recordado mucho en el punto en el que nos encontramos hoy mismo con nuestra programación televisiva en el que los realitys shows reflejan la realidad de una manera falsa e incluso fraudulenta, entreteniendo a unos espectadores cada vez más inmunes al enfrentamiento entre los participantes. Esta vulgaridad televisiva bate record de audiencia, reflejando así la sociedad en la que vivimos.

El concurso que nos presenta Alberto no está lejos de hacerse realidad. Aunque de una manera extrema y llevado a la máxima expresión. Las preguntas que se nos van haciendo a lo largo de la lectura son: ¿Cómo afrontar un concurso en el que están en manos de otros? ¿Están experimentando con los concursantes? ¿Saben cómo reaccionar en una situación extrema? Es una broma, un concurso o un experimento. He aquí la cuestión que tenemos que averiguar.

La narración está en tercerea persona, en el momento presente y contando directamente lo que va sucediendo en el concurso. Hay saltos al pasado para presentar las vidas de los participantes y para inducir al lector en la consecución del juego.

Está distribuido en 14 capítulos y un epilogo que se leen en un suspiro pues Alberto sabe enganchar el lector con su pluma sencilla.

En cuanto a los diez concursantes la falta de empatía salta a la vista. Cada uno lleva su mochila más cargada de situaciones difíciles y errores injustificables. Un pasado que les ha llevado a participar en ‘Purgatorio'.

Al final el puro morbo es lo que mueve a la gente. Lo malo es que el morbo se va normalizando y siempre se necesitan cosas nuevas. Más que en el 'Purgatorio', los diez concursantes se encuentran en el mismo infierno. ¿Qué hacías tú si estuvieses allí?
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