Esta segunda parte es mucho más ágil de leer que la primera, no sé si debe a que los capítulos son más cortos, o que hay más acción y menos reflexiones interiores, o a una combinación de ambas cosas. Cathy sigue siendo nuestra narradora, y a través de su vida y de sus pensamientos conoceremos su evolución y la de su familia. En esta ocasión sí que he notado que esta narración hacía que la historia se me quedase corta porque me gustaría saber más acerca de los demás hermanos. Además, en este libro no he conseguido empatizar del todo con Cathy, muchas de las cosas que hacía no las he llegado a entender, y a veces tenía unas ganas tremendas de gritarle. A pesar de esto, la historia me ha gustado. Me ha gustado ver la evolución de la familia y el rumbo que toman sus vidas, y cómo se van sobreponiendo a los distintos problemas que les prepara el destino. |