 |
Una historia de amor feel good. Eso es lo que es Los chicos rubios. Es atrapante, dulce, tierna, divertida y, por supuesto, romántica y hot* . Lisandro consiguió que cada vez que tomara el libro me sintiera bien, me olvidara un rato del mundo y fuera feliz con Los chicos rubios. . La historia se trata de un papá y su hijo, Sebas y Aurek, que llegan a vivir a un lugar mágico, escondido entre bosques pero muy cerca de la ciudad. En este sitio, Sebas conoce a Oleg, el dueño de un restaurante del pueblo (perdón, del barrio😉) y se enamora de él. Y aquí surgió la primera reflexión para mí, porque eso también logra el libro, que reflexiones sobre el amor y la homosexualidad, sin proponértelo . La primera reflexión me surge del hecho de que mi sexo biológico, mi género y mis preferencias sexuales están en concordancia, y por eso mismo, nunca tuve los problemas de identidad ni las dudas que asaltan a los personajes. de hecho, me sentía muy triste con algunas partes en las que se muestra el rechazo de la familia y la sociedad hacia la comunidad LGBTQ, y me encontraba pensando "que horrible que esto sea así para tanta gente en el mundo, qué horrible que a tanta gente no le importe"😢 . Sin embargo, Sebas y Oleg logran superar todos esos obstáculos y ser felices con su amor. Sobre todo Sebastián, que siendo un hombre heterosexual, acepta con mucha naturalidad lo que siente por Oleg. "No te enamoras de una persona, sino de un alma". Si vamos a etiquetar, podríamos decir que Sebas descubre que en realidad es Demisexual, o Pansexual, pero es maravillosa la forma en que pone el amor por encima de cualquier otra consideración. El apoyo de su hijo Aurek también es hermoso . En la novela hay varias escenas eróticas 🔥💗que están muy bien tratadas, son candentes y emotivas al mismo tiempo |
>
