El hombre de tiza

Si he de ser totalmente sincera, este libro no ha sido lo que esperaba. Tras la sinopsis y sus numerosas críticas positivas me cree en mi mente una idea diferente de lo que me he encontrado.

El libro nos presenta a Eddie Adams, quien nos irá narrando sucesos de su vida intercalando 1986 y 2016. Los acontecimientos de ambas épocas se irán entrelazando trayendo al presente recuerdos enterrados y sospechas olvidadas. En este sentido ha sido interesante ir viendo el cambio tanto del personaje como de las personas de su alrededor y observar como todo ha evolucionado pero hay ciertas cosas que siguen enquistadas dentro de ellos.

La trama me ha resultado interesante, pero no ha llegado a engancharme tanto como esperaba. Sí ha tenido momentos de suspense donde he estado muy intrigada, pero la mayor parte de la lectura ha sido tranquila, asistiendo simplemente a momentos vividos por el protagonista. Sin embargo, estos capítulos son necesarios para entender lo que acontece después.

No negaré que las resoluciones de ciertas cosas me han impactado y no me las esperaba para nada, así que en ese sentido estoy contenta. No obstante, me ha faltado un "algo" final. A pesar de haberme sorprendido, no me he quedado del todo satisfecha. Espera una conexión mayor o algo más... no sé explicarlo con claridad. Además siento que se han quedado algunos cabos sueltos. Aún así ya digo que estoy contenta por las sorpresas que me he llevado, especialmente en el epílogo.

La forma de escribir de la autora es muy amena y fácil de leer, lo que hace que sea una lectura ligera y nada pesada. Como digo hay capítulos más tranquilos, pero no se hacen largos ni aburridos.

En resumen, "El hombre de tiza" es un libro interesante con bastante suspense y giros que sorprende, pero personalmente esperaba un poco más. Me ha faltado un "algo" que lo hiciera destacable.