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¡Hola lectores! Mi reseña de hoy va para una novela que desde que vi su portada y leí su sinopsis tenía muchas ganas de leer, y no me ha decepcionado para nada. Se trata de una novela de terror gótico con toques sobrenaturales. Imagínate que de la noche a la mañana te enteras que eres la última descendiente de un antiguo linaje y además dueña de un castillo y condesa. A eso es a los que se enfrenta la protagonista de esta novela. al vértigo de ver su vida transformada para siempre y enfrentarse a terribles y oscuros secretos familiares. tiene todos los elementos esenciales para pasar un buen rato de lectura, lleno de misterio y tensión. Con una ambientación magnífica, la autora es capaz de ir desgranando poco a poco una historia fascinante y muy original, con descripciones que nos meten de lleno en la atmósfera de la trama. Los personajes están muy bien desarrollados, tanto la protagonista como los secundarios. Es fácil conectar con el sentimiento de pérdida, de frustración que siente la protagonista Bert y como le cambia la vida de una día para otro y su ansia por descubrir qué está pasando. En general, se nota que la autora se ha documentado muy bien para crear esta historia. Una obra original y muy bien escrita. Empieza con un ritmo trepidante, para luego llevar un ritmo más sosegado pero lleno de misterio que hace que no puedas parar de leer para saber qué va a pasar. El final no decepciona y, aunque no quiero desvelar nada, me ha gustado porque me parece acorde y congruente con lo que cuenta esta historia. Secretos familiares, un castillo asilado en las montañas, los misterios de la genética humana, mitos y leyendas de las montañas, que están plagados de monstruos y criaturas imposibles. Sentimientos poderosos como la pérdida, la maternidad o la amistad y la familia, son algunos de los elementos de esta novela. Sin duda, una autora con una mente brillante, de la que estoy deseando leer más. |
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