Þîbuleac ha parido a un protagonista difícil de olvidar, perfectamente construido y cuyos desequilibrios mentales no sólo nos emocionan o repugnan a partes iguales, sino que también nos ayudan a entender la soledad del diferente y a como el arte, en ocasiones, actúa como una pastilla que palia pero no cura, como la única forma de comunicarse en un mundo en el que, individualmente, también ha dejado de existir.
Enlace: https://jimenadelaalmena.blo.. |