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Cariño, cuánto te odio nos cuenta la historia de Lucy, una asistente editora cuyo sueño era trabajar en una editorial y lo está cumpliendo pero la fusión de su empresa con otra hace que tenga que trabajar con Joshua Templeman, otro asistente editor. Él sólo ve números y ventas. Su relación no es la típica entre compañeros, ellos se odian y ese odio se irá haciendo mayor cuando se les da la oportunidad de ascender, teniendo que competir entre ellos. Sin duda sabía que este libro me iba a gustar, me encanta el cliché de amor-odio y en este libro eso está muy bien llevado. La historia se cuenta desde la perspectiva de Lucy que nos narra el día a día de ambos personajes, ya que a pesar de que se odian, me sorprendió mucho la cantidad de cosas que saben el uno del otro. Me ha encantado ver el tira y afloja entre ambos personajes, Lucy es esta chica bajita, buena, muy inteligente y creativa, que con muchos colores y que ama trabajar en la editorial. En cambio Joshua es calculador, distante, algo grosero y muy ordenado. Me he reído mucho con sus juegos "el juego de las miradas", sus apodos, sus amenazas con ir al departamento de recursos humanos y sus conversaciones. En cuanto a los personajes, Lucy me ha gustado bastante, su desarrollo y su manera de afrontar las cosas me gustó mucho. En cuanto a Josh si que me hubiera gustado ver capítulos desde su perspectiva para entender mejor su comportamiento, además había algunas cosas de él que no acababan de cuadrarme. La pluma de la autora me ha gustado mucho, sabe bien que hacer para engancharte a sus páginas. Es una escritura bastante simple con muchos diálogos que lo hacen más ameno y consigue que lo puedas leer muy rápido. No se hace para nada pesado y los capítulos son muy bastante cortos. En cuanto a los aspectos negativos diría que a veces nos comportamientos y las actitudes de Josh no me han convencido demasiado, sabemos que es frío pero también que está enamorado de Lucy, así que me ha costado acabar de entenderle; creo que con algunos capítulos contados por él hubiera quedado mucho mejor explicada su personalidad y sentimientos. En definitiva, Cariño, cuánto te odio es una que aunque me ha gustado ha habido cosas que no me han convencido del todo. Aun así, es una historia de romance ligera perfecta para desconectar. |
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