Te regalaré pensamientos

Todas las decisiones que tomamos tienen sus consecuencias. Lo que dicta la diferencia entre unas personas y otras es la manera de afrontarlas.

Esta sociedad cargada de valores, de intachables comportamientos y normas de sociedad, es mucho más hipócrita de lo que aparenta. Muchos de los que se proclaman dechados de virtud esconden actitudes más que reprochables. Como adicciones al juego, al sexo, a la bebida o a todas juntas. Pero nada de eso importa si no se sabe, si se esconde o si se tiene un título que pueda acallar bocas.

El tiempo no vuelve atrás, por lo tanto, planta tu jardín y adorna tu alma en vez de esperar a que alguien te traiga flores.
William Shakespeare

-Quizás ese fue el error, madre -la interrumpió-. Aislarme del mundo y no dejarme experimentar lo que la mayoría de jóvenes de mi edad aprendían.

-¿Son tus preferidas? -insistió.
-Son pensamientos. En realidad las adoro a toas, pero ahora les dedico más tiempo a estas porque se marchitarán pronto. Algunas ya están perdiendo sus pétalos.

—Todas las decisiones que tomamos tienen sus consecuencias. Lo que dicta la diferencia entre unas personas y otras es la manera de afrontarlas.

Y si lo que te preocupa es lo que digan los demás, recuerda y ten presente siempre esto: el dinero es la mordaza más poderosa que existe. Todo lo compra, lo acalla y lo silencia. Mientras tengas dinero, tendrás poder

—Aguardaremos a que se cambie y regresará de inmediato. Lo importante no es tropezar, es levantarse y seguir adelante. ¿No es eso lo que te digo siempre, Maddison?
—Sí, padre —susurró con su dulce voz.
—Pues levanta esa cabeza. No tienes nada de qué avergonzarte.