Tú de Marte y yo de sábados

Cada novela de la autora es un soplo de aire fresco y una lectura asegurada.

Candy se instala en una cabaña en la que vive Lion, una estrella de Rock con la que, en 17 días, tiene que convencer e inspirar para la creación de un villancico, el cual, será la salvación para la empresa e incluso para ella misma. Es todo un reto pero... ¿lo conseguirá?
La PORTADA: es ver esa portada y sentir paz, tranquilidad y ese aura de los días navideños. Es una auténtica preciosidad y le va muy pero que muy bien a la historia. El TÍTULO sin duda alguna es el adecuado y con mucho significado. La combinación portada - título son perfectos.
La novela está FORMADA por 44 capítulos que aparecen en números romanos que corresponden a un tiempo, 13 capítulos en números cardinales que equivalen, por así decirlo, a otro tiempo y además, entre medias nos encontramos un total de 10 pistas, osea la letra de 10 canciones.
La historia está CONTADA en primera persona por ambos protagonistas, algo que me encanta. Son en más abundancia los de Candy, algo que ha estado bien aunque, más de Lion no me hubiesen importado (guiño guiño).
AMBIENTADA en una cabaña "perdida" sin especificar el lugar exacto pero que se identifica en Londres. Además, un ambiente de lo más navideño que es la clave tanto para personajes, historia e incluso para el lector.
La TRAMA es de lo más bonita, recuperar a un rockero perdido mediante la creación de un villancico, habrá hueco para el romance, obviamente. Con ello lleva a conocer a ambos protagonistas y profundizar en sus vidas lo que hace la historia más entrañable y profunda.
Los PERSONAJES:
LIONHEART un rockero en horas bajas (como bien nos indica la sinopsis) se ve acorralado por una CANDY que tiene una misión muy clara: que el rockero cree un villancico. Para ello sacará sus armas, no solo de mujer, sino además de todo lo mejor que ella tiene. Días solos, una cabaña, soledad... estos dos nos darán momentazos. Es cierto que me encataría contaros más de ellos pero, la gracia de todo ello, es que poco a poco los conozcáis.
La PLUMA de la autora: siempre digo que Dona con sus dedos hace magia. Tiene una forma de escribir que nos canta y que saca una dulzura estupenda en cada una de sus novelas.
A modo CONCLUSIÓN: la novela ha sido muy bonita, entrañable, acorde a la época que se viene como es la Navidad. La autora consigue que se produzca ese pellizquito de regustirrinín. Unos personajes que tienen sus cosillas que llegan al corazón. Candy me ha gustado pero Lionheart no se ha quedado atrás ya que, pese a ser un rockero y yo no les tengo mucho cariño el la literatura, ha sido un personaje de lo más entrañable, que me ha conquistado de principio a fin. La autora ha sabido tocar mi fibrilla y sin duda, es un acierto para esta época del año tanto por la historia en sí, ambientación, pluma, personajes y por la calidez tan rica que desprende cada una de sus páginas.
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