Una fábula muy divertida sobre el derecho a ser como somos (y no como los otros quisieran que fuéramos).
«Hace mucho tiempo; en realidad, fue un martes», un oso fue a su cueva para pasar el invierno durmiendo, como hacen los osos. Cuando se despertó, a principios de primavera, se encontró que los árboles habían desaparecido, la hierba había desaparecido, las flores habían desaparecido... y en su lugar había edificios, coches y vallas. Y su cueva estab... >Voir plus