𝙴𝚕 𝚏𝚒𝚗 𝚍𝚎 𝚕𝚘𝚜 𝚑𝚘𝚖𝚋𝚛𝚎𝚜 es un libro duro, su historia abre heridas que todavía no hemos superado tras una pandemia que se ha llevado demasiadas vidas y que ha dejado rotas a otras muchas. El libro empieza con el descubrimiento de una nueva enfermedad que se contagia tan rápido como mata, pero con una peculiaridad: solo afecta a los hombres. La premisa nos suena (ojo, que el libro lo escribió antes de la pandemia como ella misma cuenta). Conoceremos el desarrollo de la enfermedad a través casi exclusivamente de mujeres que tienen que tomar las riendas de una sociedad en la que profesiones como el cuerpo policial, el de bomberos y la alta política pertenecen en gran medida a los hombres. La historia nos muestra la pérdida que sienten las madres, hermanas, hijas y esposas al perder a sus seres queridos, la desolación y la rabia. La descomposición de naciones, las guerras civiles, las conspiraciones, el miedo y la desinformación. Pero también nos habla de esperanza y cooperación, de superación de prejuicios y del poder de las personas para seguir adelante. Nos muestra que una sociedad unida es capaz de sobreponerse a todo y que el futuro puede ser brillante. Es un libro que se lee con facilidad pero en algunos puntos me ha resultado pesado y aburrido. Cuesta entrar en la historia porque cambia muy a menudo la narradora, aparecen voces nuevas durante el desarrollo y las historias al principio no tienen conexión. Aún así, es un libro que explora una perspectiva interesante y que recomiendo si disfrutáis de las distopías. |