Proyecto B.E.L

Alina es una joven astrofísica rusa que trabaja en el Centro de Investigación Galín situado en Londres. En concreto, junto a otros compañeros, está trabajando en un ambicioso proyecto llamado Breakthrough Listen. Están recopilando datos extraídos de las escuchas de radio captadas por los radiotelescopios, sonidos procedentes del espacio, buscando la posibilidad de encontrar algún sonido extraterrestre.

Un día su compañero Marcus le informa de que ha realizado un descubrimiento tremendo, que puede cambiar el curso de la historia y la forma en la que la humanidad se enfrenta al espacio. También le dice que cree que le siguen y que su vida corre peligro. Precisamente, Alina es testigo de cómo su amigo es atropellado a la salida del trabajo. Una ambulancia acude rápidamente al lugar y se lleva al malherido Marcus. Pero cuando Alina intenta averiguar a qué hospital le han llevado, resulta que nadie sabe nada: no hay enfermo, no hay cuerpo, la policía incluso duda que haya habido un accidente.

Un asesino a sueldo llamado Liam se va a cruzar en su camino y, a partir de entonces, tanto la vida de Alina como la del propio Liam van a correr peligro. Todo está relacionado con Marcus y su descubrimiento así que ambos protagonistas inician una carrera contrarreloj para descubrir los secretos de Marcus antes que los asesinos.

“Proyecto B.E.L.” es un thriller en toda regla. Una de esas novelas que empiezan fuerte, planteando muchos interrogantes desde un principio y que te mantienen en tensión hasta el final. Desde ese principio hasta ese final hay un camino plagado de sorpresas, giros argumentales, persecuciones, interrogantes y, sobre todo y ante todo, mucho ritmo.

Siempre me ha sorprendido lo concatenadas que están mis lecturas sin yo buscarlo ni pretenderlo. Hace unas semanas “Origen” de Dan Brown me planteó las preguntas “de dónde venimos? Y ¿adónde vamos? Y, al poco tiempo, María Suré y su “Proyecto B.E.L.” me hace unas preguntas similares: ¿cómo formó el mundo? ¿somos los únicos habitantes de la galaxia? A pesar de preguntas tan transcendentales y del ámbito en el que se desarrolla la novela no temáis: no es una novela sobre extraterrestres ni nada similar sino una novela con los pies firmemente asentados en el suelo. Alina y Liam no se van a tener que enfrentar a monstruitos verdes sino a asesinos de carne y hueso y a oscuros intereses ocultos. Su lucha será de lo más terrenal

Como ya hiciera en la novela anterior, la autora va entrecruzando diferentes tramas: así, además de la trama principal que es de la que hasta ahora os he hablado, hay una serie de tramas secundarias -algunas se quedan en simples anécdotas y datos curiosos, otras tienen mucha fuerza e intensidad (como la de un asesino en serie que está investigando la policía). Todas ellas están mezcladas de manera magistral, de tal manera que no descentran de lo principal que quiere contar la autora sino que lo enriquecen dando más interés y ritmo a una trama que ya de por sí tenía mucho de ambos.

Al servicio de las diferentes tramas tenemos un buen elenco de personajes entre los que destacan Alina, Liam y Marcus. Alina es una mujer con la que enseguida conectaremos; me ha recordado mucho a la protagonista de “El color del perdón”: enseguida me puso de su lado, me preocupé por lo que le pasaba, viví y sufrí con ella. Me ha gustado todo de ella. También Liam me ha gustado mucho y eso que es un personaje que tiene sus cosas. Habrá aspectos suyos que no aplaudiremos y, sin embargo, también nos pondremos de su lado. Y luego tenemos a Marcus que, si bien en la sombra por cuanto desaparece en el primer capítulo, va a estar ahí a lo largo de la novela y como eje conductor de la misma.

La trama científica me ha parecido muy original y muy bien explicada (enriquecida con la nota final de la autora en la que nos explica su interés por la astrofísica). Es un tema que a mí nunca me ha interesado y, sin embargo, me ha gustado mucho la forma en la que lo aborda María, supongo que porque se trasluce su pasión por él. Pero es que, además de parte científica, hay mucho más: una investigación criminal, una historia de amor y, sobre todo, un thriller muy intenso

María escribe muy bien, ya lo descubrí en su primera novela y lo he vuelto a constatar en ésta. Describe muy bien escenas, escenarios y personajes, tiene una prosa sencilla y directa pero muy cuidada, combina en su justa medida narración y diálogo, sabe manejar la intriga y coordinar diferentes tramas. La novela tiene un ritmo trepidante, engancha de mala manera y se lee sola. Es un libro hecho para el entretenimiento

Conclusión final

Si os gustan los thrillers que aúnan un ritmo frenético y una trama potente, no os podéis perder “Proyecto B.E.L”


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