Me ha encantado esta pareja. Una historia muy bonita, romántica, llena de sentimientos y de complicidad entre los protagonistas. Mort y Felix se conocen de siempre, se han criado juntos, pero han estado separados el ultimo año y han ocurrido muchas cosas, Mort estaba muy unido a la familia Rochester, pero tuvo que marcharse y tras su vuelta tiene que volver a ganarse su lugar en la familia, hay secretos, rechazo, malentendidos y celos. Todo sucede a fuego muy lento, entre viajes en coche como chófer y muchas conversaciones, una vez recuperada la amistad, es muy dificil dar un paso más, hay dudas y miedos a perder lo ganado. Me ha gustado mucho el ambiente tan familiar, las niñas y todas sus actividades; desde el baile a las ciencias, esa madre que vuelve a ser la de antes y como se sinceran entre todos. Los personajes son perfectos, Felix es un chico super responsable, tierno, inocente y con muchos sueños de futuro. Mort es un encanto, ha sufrido y tiene muy claro lo que quiere, lo que siente y hará todo lo posible para demostrarlo con hechos. Esta contada en primera persona por sus dos protagonistas de forma alternativa y sin un orden establecido, se notaba perfectamente cuando hablaba uno y cuando el otro, metiéndonos de lleno en sus pensamientos. Yo me lo he pasado muy bien con ellos, me ha dado pena terminarlo y me ha encantado saber de otras parejas de sus anteriores libros, con momentos muy bonitos y emotivos, con sentido del humor y muy familiar. Lo recomiendo. |