Primer libro de una serie, que para empezar no está nada mal. Un thriller policiaco que se desarrolla en los países nórdicos asique con esa ambientación no puede ser malo. La historia ocurre en Sandhamm, una isla de Estocolmo, donde muchos veraneantes van a pasar las vacaciones. La trama comienza con la aparición de un cadáver en la playa, que lleva bastante tiempo, y que de primeras se cree que ha muerto ahogado. Entraran en juego nuestros dos protagonistas, Thomas (inspector de Policía), que será el responsable de llevar el caso, y Nora (abogada), amiga de la infancia de Thomas y que se encuentra en la isla con su familia. Unos días más tarde aparece otro cadáver y es entonces cuando se comienza la investigación, unos asesinatos que a primera vista parecen fáciles, pero que con el paso de las hojas se iran complicando ya que no existen pistas solidas ni ningún móvil. Me han gustado mucho los dos personajes principales, están bien construidos y cada uno tienen sus problemas personales, miedos, dudas… si que es verdad que según llegaba el final, descubrí quien estaba detrás de todo, pero es verdad que es una historia muy agil, que desde un principio te tiene enganchada y que se lee en un suspiro. Además la ambientación es genial, la autora describe perfectamente la isla, tanto es así que hace que te metas de lleno en la historia, y como he podido saber, la autora misma pasaba veranos en esta isla. Algo que no me ha cuadrado mucho, es la cantidad de detalles policiales que se cuentan entre los personajes, y que yo creo que deberían ser mas confidenciales. Pero en resumen ha sido una historia que me ha gustado y que seguro seguire leyendo sus siguientes libros. + Leer más |