Espontánea

En la piscina hay orillas. Hay maneras de salir. Tú has sido una orilla en mi piscina durante todo el tiempo que pueda recordar.

—Pero tú no eres gay —dije.
Jenna se encogió de hombros de nuevo.
—No sé lo que soy y tampoco sé qué era Katelyn. Pero fue un buen beso, eso te lo puedo asegurar.

Un coro interpretó la canción favorita de Katelyn, una pieza preciosa. La letra era un tanto sexy para la ocasión, pero a quién le importa, ¿no?: era su favorita; y si no se puede tocar tu canción favorita en tu funeral, ¿entonces cuándo?

And as long as the world spins on, we can still dance. No matter who we are, we can always dance.

"El lunes era Halloween y hubo clase de nuevo. La mayoría de los chicos y de los profesores evitó los disfraces. Vi algunos mocasines láser en la entrada como un homenaje a Brian, pero hasta ahí llegaba la mascarada. Todo el mundo fingía que las cosas habían vuelto a la normalidad o, por lo menos, al tipo de normalidad en la que juegas al fútbol americano otra vez."

"Tiene sentido. En el pasado, los chicos no estallaban de la nada... Ni un chico. Ni una explosión. Ah, los buenos viejos tiempo..."