Estudio en negro

Yo no era lo que me habían enseñado a ser, lo que siempre habían dicho otros que era.

Y llorar no me afeaba: llorar entristecía a quien me apreciaba.

Comedia. Tragedia. Y a respetarse a sí mismo y no aceptar nunca, nunca, aquello que fuera por completo contrario a él.

Frente al mal aún me queda el consuelo de que el bien me defienda, pero ¿quién puede defenderme del bien?.

Busca apiadarse de la gente para que la gente le devuelva un poco de piedad. Yo vivo en una cáscara de nuez y me siento rey del universo, pero usted vive en el mundo y se siente un pequeño gusano en una nuez.

Anticipar jugadas es la única forma de ganar.

La verdad nunca es democrática, no depende del número de personas que crean en ella, más bien es al contrario: suele reservarse para la minoría atenta y selectiva, por eso la política es un fracaso absoluto.

Tengo natural pavor a la policía, casi más del que siento ante los malhechores, porque con estos últimos siempre cabe la posibilidad de recurrir a la policía. Dicho de otra forma: frente al mal aún me queda el consuelo de que el bien me defienda, pero ¿quién puede defenderme del bien?

¡Lloro y río a la vez! ¡No sé por qué me pasa! ¡Cuándo veo cosas... lloro y río!

Lo bueno de los que siempre tenemos mala suerte es que no somos supersticiosos.