Ana Clara teje su destino - Parte I: El juego que apaga la voz

&#xNaNDesde el momento en que tomé entre mis manos esta maravilla, supe que me adentraría en un relato lleno de emociones y vivencias . La sinopsis, breve pero intrigante, prometía una historia de vida que despertó mi curiosidad.

Los primeros capítulos me sumergieron en un encuentro inicial con la abuela Crispula, una niña en su amado Paraguay. A medida que avanzaba en la lectura, presenciaba su crecimiento y cómo enfrentaba diversos horrores mientras daba vida a sus hijos junto a Pablo, un pieza. 😢

Con cada página, me adentraba más en la vida de la abuela, para luego seguir con la historia de Emma, y si debo decir que fue cruda, me quedaría corta . Sus experiencias me conmovieron profundamente y me llevaron a reflexionar sobre la dureza de la vida. Y luego, llegué a conocer a Ana Clara, cuya vida había sido destrozada por aquellos que debían amarla y protegerla. 😔

A lo largo de la lectura, encontré personajes que despertaron en mí sentimientos de odio y desprecio. La tía Liz, en particular, me pareció una figura siniestra, como una Madame dispuesta a vender su alma al demonio por un puñado de billetes. Sin embargo, lo que más me impactó de esta novela fue la lección que transmitía. No importa cuán cruda haya sido la vida, cuántos golpes hayas recibido, siempre puedes levantarte y luchar por una vida mejor, por un futuro en el que nadie pueda silenciarte.🥰

Si bien esta historia no pertenece al género de la fantasía y el color, merece ser leída ,brindarle una oportunidad. Está narrada con dulzura y cuidado, con un profundo respeto por sus personajes y, sobre todo, nos recuerda que los horrores del mundo existen, aunque a veces finjamos que no los vemos. Es una obra que nos invita a reflexionar y nos muestra la importancia de alzar la voz y luchar por aquello en lo que creemos.