La piel fría

La piel fría, un título que nos llevará a entender que vamos a encontrar una civilización con seres extraños que tienen la piel fría y también la forma de pez, ya que provienen del mundo submarino.

Y estas criaturas atacan cada noche a los que tienen a su alcance, que serán un joven narrador y meteorólogo y un farero que unirán sus fuerzas para sobrevivir a estos agresivos ataques.

Una novela de lectura rápida, a pesar de haberlo leído en catalán y de tener una historia, para mí, un tanto incómoda. Sin embargo, engancha y deseas seguir, aunque también he de decir que es muy inquietante.

Es una novela circular, empieza y termina de la misma forma, que nos plantea dudas que nos llevan a intensas reflexiones sobre las actuaciones de los protagonistas. Tiene intriga, aventura, terror, ciencia ficción y filosofía.

Su argumento se resume brevemente y en apariencia, es muy simple: dos hombres encerrados en un faro se defienden, noche tras noche, del asedio al que lo someten unas criaturas submarinas que atacan solo por la noche porque odian la luz.

El protagonista y narrador llega huyendo de un pasado como activista del IRA a una isla perdida en el océano, como meteorólogo, en la que tendrá que estar un año y donde solo existe una cabaña y un faro en el que habita el único ser humano Batís Caffó, al que se unirá para defenderse de los ataques a los que son sometidos.

Sin embargo, la novela encierra una gran complejidad al plantarnos los grandes interrogantes de la condición humana. Lo importante es el proceso mental de cada uno de los personajes, las relaciones que se establecen entre ellos y con el entorno, así como la manera de entender y afrontar la realidad de lo que están viviendo.

Se plantea, por lo tanto, la percepción del ser humano hacia otro ser muy diferente, una criatura que viene del mar y se cuestiona la actitud que hay que adoptar frente al extraño.
Queda claro que es una clara confrontación entre dos realidades opuestas y cuya única relación posible es la violencia a todos los niveles.

Es, para mí, una novela claustrofóbica y delirante con diversas interpretaciones que me ha llenado de sensaciones desagradables, la antipatía hacia los personajes o el asco y la repulsión.

Respecto a los personajes, podemos hablar de los dos hombres de muy diferente formación , y también de un ser acuático que el farero ha decidido que sea su compañera. Tres personajes que, aunque independientes, diferentes y entre los que no hay apenas comunicación, no tendrán más remedio que relacionarse y convivir para defenderse del peligro que les aguarda cada noche.

Tenemos al irlandés, el meteorólogo y narrador, es experto en señales que aparece en la novela sin un nombre, pero ha llegado a una isla, alejada y olvidada, con una misión inútil , más bien parece que esté allí a modo de un exilio voluntario y en la que tendrá que permanecer durante doce meses en una caseta en un extremo de la isla desde donde puede ver el gran faro justo en el otro extremo.

Tenemos al farero, el habitante de un imponente faro al que ha llenado de estacas afiladas a modo de protección, de aspecto descuidado y que extrañado de la llegada del otro y sin poderlo evitar apenas le dedica una breves palabras para presentarse . Aunque más adelante tendrán que convivir en el faro para defenderse de esas criaturas hostiles del mar, que todas las noches los atacan.

Y también podemos considerar como un personaje que tiene bastante interés a una criatura del mar que convive con el farero , la llama Aneris, es una hembra, en realidad, si la leemos al revés nos sale la palabra sirena, resulta bastante curioso y se puede relacionar con la sirena que retiene a los hombres. No sé, pero esto me parece interesante.

Pero también lo es, que a estos seres marinos se los llame cicatuca, que si lo leemos a la inversa pues tenemos la palabra acuatic. ¿Qué os parece? La verdad es que llaman la atención estos anagramas.

Una novela donde el aislamiento y la incomunicación producen monstruos.
Y podemos preguntarnos ¿Quién es el verdadero monstruo? He aquí la cuestión y evidentemente nos plantearemos que si los humanos encontramos diferentes, horribles y repugnantes a los seres que aparecen aquí, también ellos pueden ver a los humanos que encuentran exactamente igual de horribles y repugnantes. Y el extrañamiento es absoluto entre los humanos y las criaturas anfibias ya que nos encontramos con especies distintas.

Prosa muy clara y directa pero también rica en metáforas porque en definitiva, estamos ante una tremenda alegoría sobre la condición humana.

Además es una lectura que está llena de muchas referencias culturales y en la que son citadas grandes obras literarias.
Se hizo una adaptación cinematográfica también llamada, la piel fría, yo no la he visto pero sí he oído hablar de ella.

En definitiva, un relato de fantasía que tiene ciertos matices que recuerdan a Lovecraft , además de incitarnos a planteamientos reflexivos y a preguntarnos sobre la condición humana ¿Quiénes somos?

Si la leen, ya me dirán sus sensaciones.